Menos brindis con champaña, nada de agua caliente en los baños y menor consumo en iluminación  serán algunas de las sorprendentes medidas que ha tomado el Parlamento belga para ahorrar, mientras el país debe apretarse el cinturón para cumplir con las medidas de reducción de déficit que exige Bruselas.

Según informa hoy el periódico belga flamenco "Het Laatse Nieuws" en su edición digital, los diputados belgas no sólo han renunciado al 5% del sueldo, sino que también sacrificarán algo de comodidad en la Cámara. De acuerdo con varios medios belgas, las medidas deberían reportar un ahorro de unos 5,6 millones de euros (cerca de 3 mil millones de pesos chilenos).

Según la agencia de noticias DPA, El presidente del Parlamento, el socialista André Flahaut, aseguró que las medidas entrarán en vigencia una vez que sean aprobadas por la cámara en una votación a comienzos de febrero próximo, fecha en la que se conocerán más detalles del paquete de ahorro. Mientras tanto se sabe que para dar ejemplo, Flahaut ha decidido cambiar su lujoso coche oficial por otro automóvil más modesto y que consume menos gasolina y el resto del parque automotor del Parlamento federal belga no será renovado.

En la ola de ajustes económicos que recorre Europa, con una deuda pública enorme, también el rey belga, Alberto II, ha querido dar ejemplo y hace unos días se comprometió a pagar parte de sus gastos, para ahorrar entre 500 mil y 600 mil euros (300 a 350 millones de pesos)

 "Esto muestra que en países con problemas financieros graves, ni siquiera las monarquías pueden escapar a la presión", señaló al diario argentino Clarín el profesor Herman Matthijs, quien enseña Finanzas Públicas en la Universidad belga de Ghent.

Según el diario trasandino, La cantidad puede ser pequeña, pero esto ayudará a disminuir la presión sobre la familia real, que se incrementó en las últimas semanas cuando se hizo patente que la Constitución belga obliga al gobierno a pagar el ajuste por inflación bajo cualquier circunstancia, y mientras Bélgica se prepara para imponer el próximo mes nuevas medidas de austeridad a la población .

Bruselas debe mantener su presupuesto anual dentro del 3% del producto interno bruto real exigido por la Unión Europea, o arriesgarse a sanciones escabrosas. "Tendremos que tomar medidas serias en febrero, y cualquiera que asevere que no se sentirán está equivocado", advirtió la semana pasada a la agencia de noticias Associated Press el ministro de Finanzas Steven Vanackere.