Los fuertes calificativos que utilizó el fiscal de Collipulli, Luis Chamorro, sobre los jueces que absolvieron a Daniel Melinao, por la muerte del cabo de Carabineros Hugo Albornoz, generaron diversas reacciones en el Poder Judicial y se convirtió en el blanco de las críticas de las personas que rechazan su actuar en la denominada "zona roja" de la Región de La Araucanía.

La polémica partió el jueves, tras el fallo del Tribunal Oral de Angol. A la salida de esa audiencia, Chamorro señaló que los magistrados no tuvieron "la dedicación intelectual continua e ininterrumpida" y que estaban "desconcentrados". Esto provocó que ayer su superior, el fiscal regional de la IX Región, Cristián Paredes, le pidiera un informe sobre sus dichos, dado que el tono de la crítica habría generado malestar al interior del Ministerio Público. El vocero de esa fiscalía, Roberto Garrido, dijo que deberá entregarlo la próxima semana y que arriesga "un sumario administrativo si es que se estima que pudo haber alguna infracción reglamentaria e imponer sanciones, que van desde una amonestación". Además, el presidente de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, calificó sus declaraciones como precipitadas.

La historia de este abogado de 43 años, oriundo de Concepción, no ha estado ajena de la polémica y los reconocimientos. Los comuneros señalan que su actuar es por un ánimo contra los mapuches y califican como brutales sus allanamientos, mientras que las personas que trabajaron con él recalcan su trabajo en terreno y que ha logrado significativas sentencias por hechos de violencia en Ercilla. Una de ellas tiene que ver con el fallo en contra de los comuneros Fernando Millacheo y Cristián Levinao, quienes fueron condenados a 10 y 15 años, respectivamente, por distintos robos con intimidación a agricultores de la zona.

Chamorro estudió Derecho en la Universidad de Concepción y su ingreso a la fiscalía fue durante el 2001, en Collipulli. Su buen desempeño hizo que a fines del 2002, fuera designado como fiscal jefe de Angol, donde permaneció hasta septiembre del 2011. Cercanos al fiscal indicaron que durante los nueve años que permaneció en el cargo, se especializó en la investigación de delitos relacionados con el abuso sexual infantil. Una de las sentencias que obtuvo fue en contra del profesor jubilado Homero Estay, quien fue condenado a presidio perpetuo por 13 delitos de violaciones, abusos y producción de material pornográfico. Las víctimas fueron ocho niños de escasos recursos. En octubre de ese año su carrera dio un giro. El en ese entonces fiscal regional Francisco Ljubetic decidió que Chamorro debía volver a Collipulli, a encabezar la oficina de esa zona. La escalada en la violencia hizo que decretara diversas diligencias al interior de comunidades de Ercilla y Collipulli.

Jorge Huenchullán, wer-kén de la comunidad autónoma de Temucuicui, sostuvo que "en su ánimo contra los mapuches, está en un estado de desesperación porque no ha funcionado su montaje que él mismo armó. Los allanamientos más brutales de la policía han sido llevados a cabo por este señor". En la Defensoría Penal Pública de La Araucanía indicaron que han presentado tres inhabilidades en su contra, de las cuales dos fueron rechazadas y una está en tramitación.