Las Fuerzas Armadas han sido un factor clave en la historia reciente de Venezuela. Lo fueron durante la era del general Marcos Pérez Jiménez, en los años 50, y también durante todo el gobierno de Hugo Chávez (1999-2013). El fallecido presidente venezolano mantuvo durante parte importante de su gestión un Ejército leal a su revolución bolivariana, aunque de todos modos sufrió un golpe, en 2002. Pero las divisiones y fracciones al interior de las FF.AA. no cesaron después de que Chávez logró retomar su puesto. Años más tarde, los militares venezolanos se convirtieron en una suerte de árbitro de la transición, debido a la muerte del gobernante y, ahora, durante la crisis generada por las protestas opositoras, son protagonistas, pero en la sombra.
Las FF.AA. no han hecho mayores declaraciones respecto de la situación en Venezuela, excepto por un comunicado leído en febrero por la ministra de Defensa, Carmen Meléndez, en el que señalaban que "jamás aceptaremos a un gobierno que no surja por la vía constitucional". De su lado, Maduro cuenta, además, con Diosdado Cabello, el titular de la Asamblea General, que posee una fuerte ascendencia sobre parte importante del Ejército, en su calidad de ex teniente y compañero de armas de Chávez.
Además, la mayoría de los oficiales del Ejército que hoy tienen mando de tropa forman parte de la promoción de 1987 de Cabello. Según dijo a La Tercera el analista venezolano Luis Vicente León, "el tema militar es una caja negra y no es verdad que haya quien tenga información seria sobre eso. Sólo podemos tirar hipótesis, y ahí la conexión militar con el gobierno de Maduro es elevada, pues ante la dependencia que el presidente tiene del respaldo de las Fuerzas Armadas, no hay duda que les da todo lo que ellos necesitan para estar tranquilos".
Una posición absolutamente diferente dio el jueves el jefe del Comando Sur de Estados Unidos, el general John Kelly, quien señaló que "los militares venezolanos son leales a sí mismos, están esperando y mirando a ver qué pasa. Una señal de las sospechas del gobierno sobre hacia dónde se podrían inclinar los militares es que no los ha utilizado mucho para controlar las protestas". Hasta ahora, Maduro desplegó a la Guardia Nacional en la ciudad de Valencia y miembros del Ejército fueron enviados el martes a San Cristóbal para levantar decenas de barricadas. Según Heinz Dieterich, mentor y ex asesor de Chávez, las FF.AA. pueden decidir hacia dónde "se inclina la balanza".
