Casi nueve meses después de la golpiza que sufrió por parte de su ex novio, el rapero Chris Brown, ayer Rihanna regresó en grande. Y más sexy que nunca.
Como una suerte de renacimiento, la estrella presentó tres temas de su nuevo disco, Rated R (que sale a la venta la próxima semana) en un show en vivo en Londres. La cantante salió enfundada en un traje negro ceñido al cuerpo que dejaba parte de su espalda al descubierto, a lo que sumó una coreografía muy sensual, según reportan hoy medios locales.
El espectáculo de la cantante de Barbados -que fue transmitido a través del sitio web de la empresa Nokia- duró 40 minutos y se realizó ante 5 mil personas en el Brixton Academy, un antiguo cine situado al sur de la capital británica.
El lugar escogido -donde la cantante de 21 años además compartió escenario con Jay-Z y Young Jeezy- y la idea de que pudiera ser seguido por todo el mundo a través de la red recordaron al concierto que presentó Madonna justo hace nueve años en ese mismo escenario, y que fue visto por millones de personas en línea.
La próxima placa de Rihanna es el cuarto en la carrera de la artista y su primer corte promocional, Russian Roulette, comenzó a sonar en las radios en octubre.
La artista incluye en Rated R una canción titulada "Cold case love" en la que hace referencia a su tormentosa relación con Brown: "Lo que me hiciste era un crimen, yo te dejé regresar una vez más, pero ya es suficiente", dice parte de la letra.