Los fuertes beneficios generados por el patrimonio de la Corona británica, formado por palacios, propiedades y miles de hectáreas de terreno, gatilló que, a pesar de la crisis, la reina Isabel II recibirá un aumento de sueldo.
El llamado Estado de la Corona -que en nombre de la reina es propietario de un importante patrimonio- obtuvo en el último año fiscal hasta final de marzo un beneficio neto de 240 millones de libras (295 millones de euros), un alza del 4% frente al año anterior, según indican cifras oficiales divulgadas hoy.
Con estos beneficios, el patrimonio total de la Corona está estimado en 8.000 millones de libras (9.840 millones de euros) y le permitirá a la soberana, de 86 años, disfrutar de mayores ingresos a partir de abril de 2013.
Isabel II no tiene poder para liquidar activos del Estado de la Corona, pero sí para recibir una parte de los beneficios.
En virtud de un acuerdo alcanzado por el rey Jorge III (1738-1820) y el Gobierno en 1760, se decidió que palacios, inmuebles y tierras fueran controladas por la Corona y los ingresos que pudieran generar fueran al departamento del Tesoro que, a su vez, le pasa al monarca un sueldo fijo anual para sus gastos.
Sin embargo, este acuerdo fue modificado en 2011 por el ministro de Economía, George Osborne, y se acordó que la Reina reciba un 15 % de los beneficios procedentes del Estado de la Corona.
Así, al aumentar los beneficios del Estado de la Corona, el sueldo de Isabel II también se verá incrementado y se calcula que recibirá el próximo abril unos 36,1 millones de libras (44,4 millones de euros) para financiar sus compromisos oficiales, frente al monto fijo de 31 millones de libras (38 millones de euros) recibido hasta ahora del contribuyente británico.
Un vocero del Tesoro destacó hoy los buenos resultados del Estado de la Corona y dijo que el objetivo de estos cambios es que la casa real disfrute de unas "finanzas sostenibles a largo plazo". "Pero todo depende de que la casa real gaste la contribución de manera prudente", agregó.
Por su parte, un vocero del Palacio de Buckingham, residencia de la familia real, afirmó que la casa real esta "totalmente comprometida" a controlar el gasto.
Los beneficios del Estado de la Corona responden al incremento de las rentas de sus propiedades comerciales en zonas urbanas y por los ingresos generados por el alquiler de los fondos marinos a las compañías que tienen granjas eólicas en Reino Unido, apuntó Efe.