"Es una franquicia extraordinaria para Disney. Son demasiado bajos el riesgo y el costo que los de otros productos como Piratas del Caribe", sentencia  un experto en negocios para el sitio de CNN en julio de 2007. Pocos días faltaban para el estreno en EE.UU. de la segunda parte de High school musical y los economistas se atrevían a afirmar que el primer telefilme, hasta ese momento, ya le había reportado a la industria con orejas de ratón más de un billón de dólares en beneficios, habiéndole costado su realización sólo US$ 4.200.000. Tras otras exitosas cintas tween para su señal televisiva, como Camp rock o Programa de protección para princesas, Disney continúa con su saga de redituables filmes y el pasado 28 de agosto estrenó en Norteamérica Los hechiceros de Waverly Place: la película.

La cinta, inspirada en la serie del mismo nombre y que debuta en Chile en octubre próximo, se transformó en el programa más visto de esa semana en Estados Unidos, con más de 11 millones de telespectadores. Un récord para el canal de Mickey Mouse, ya que su teleaudiencia sólo es superada por el estreno del segundo filme de High school musical, que en su debut de 2007 lo vieron 18 millones de personas. Un proyecto inspirado no sólo por el éxito de sus predecesoras, sino además por el buen recibimiento que la serie original, ha tenido entre el público juvenil gracias a su mezcla de comedia, magia y Selena Gómez, su joven protagonista y quien recibió hace poco un galardón de los Kids Choice Awards por su rol en el show:  Alex Russo.

"Cuando me enteré de que íbamos a hacer una película, pensé que era una broma. Estaba en el edificio Disney y dije: 'Bueno', y ellos me insistieron: 'No, de verdad, vamos a hacer una película'. Y yo dije: '¿qué? ¿cuándo nos lo iban a decir?', afirma la propia Gómez ante lo rápido que fue el proyecto, asegurando además que "nos enteramos de que de verdad íbamos a hacerla, dos o tres semanas antes de filmar". En la cinta, Gómez viaja con sus padres -Theresa y Jerry (Maria Canals-Barrera y David DeLuise)- y sus hermanos -Justin (David Henrie) y Max (Jake T. Austin)- de vacaciones a la isla de Puerto Rico. Pero una discusión entre Alex y su madre desencadena un hechizo que hará peligrar el futuro de la familia, poniendo a prueba las habilidades físicas y mágicas de los Russo.