Uno en la Liga y otro en la Champions. A Luis Enrique no le importan los seis partidos invictos de Claudio Bravo ni menos su condición de mejor arquero del mes en España. Hoy, ante Paris Saint Germain, es probable que el alemán Marc-André ter Stegen tenga la misma responsabilidad que tuvo en el estreno ante el Apoel chipriota (1-0).

En la prensa catalana la consigna es clara: "Con este técnico, nunca se sabe, pero todo indica que Ter Stegen atajará". El caso es matizado por el técnico en los contactos de prensa, pues nunca ha querido confesar alguna predilección. Pese al debate, esta tarde en la capital francesa el joven germano deberá responder, pues un mínimo yerro podría sacarlo del escenario.

Este mismo debate pudo apreciarse la temporada pasada en Real Madrid. Allí, Diego López atajó a nivel local, mientras que Casillas lo hizo en la Liga de Campeones, trofeo que al final fue merengue. Hace ocho años esta situación la vivió el Milan entre la Serie A y la UEFA, actual Europa League. Carlo Ancelotti, en ese entonces, decidió que Christian Abbiati jugara en el calcio y que Dida lo hiciera en el terreno internacional.

Hoy, en Chile, Mario Salas sigue este modelo. El uruguayo Guillermo Reyes ha atajado por Huachipato en las ocho fechas del Apertura, mientras que Miguel Jiménez lo ha hecho en los cuatro pleitos de la Sudamericana. En la segunda mitad de la década del '90 puede destacar la rotación de Marcelo Ramírez y Claudio Arbiza en Colo Colo. El Rambo siempre fue estelar en el plano nacional y el uruguayo, en la Copa Libertadores.

Decisión "rara"

El ex meta culé Pedro Artola considera un tanto extraña la situación de Bravo y Ter Stegen, pues el capitán de la Roja está a sólo 20 minutos de alcanzar su marca histórica de 580 minutos de imbatibilidad en inicio de liga. "Es difícil hallar una respuesta, porque seguro que Bravo me superará. Pero Luis  Enrique tendrá sus razones. Lo hace para que ambos estén preparados ante cualquier suceso. En el Madrid ya ocurrió esto, pero es un poco raro", afirma el vasco.

Miguel Reina, otro ex blaugrana, dice que "tendrán que luchar bastante para adueñarse de un lugar que no se compra en cualquier parte. Sé que Luis Enrique podrá sacarles a ambos sus mejores capacidades, pero le recomiendo a Bravo que olvide el entorno y las presiones que existen en torno a este club".

Miguel Angel Nadal, histórico central azulgrana, en cambio, justifica que "lo  esencial es que el sistema defensivo ha sido perfecto. Barcelona había caído en los últimos años, pero ahora ha tenido un cambio positivo. Lo del meta es una señal para que todos sean competitivos, en este tipo de equipos con tanta calidad esta fórmula funciona".