Una elefanta que fue víctima de una mina terrestre hace 10 años cuenta ahora con una pata artificial permanente que expertos en Tailandia diseñaron para ayudarla a caminar.
El paquidermo, llamado Motola, se convirtió en un símbolo de los elefantes que son explotados y sus heridas generaron una oleada de donaciones y apoyo internacional.
Expertos en Tailandia han estado diseñando el molde de una prótesis de plástico para la pata frontal izquierda de la bestia de 48 años y hoy se le probó la prótesis.
"Espero que acepte la nueva pierna. Sería maravilloso ver a Motola y a Baby Mosha caminando juntas, lado a lado", dijo Soraida Salwala, directora de Amigos del Elefante Asiático.
Mosha, que también fue víctima de una mina, se convirtió en el primer elefante del mundo con una pata artificial que fue colocada en el 2007. Soraida dijo que Mosha, que ahora tiene tres años, está en buenas condiciones y que ya ha crecido lo suficiente como para necesitar nuevas prótesis.
Ambos elefantes han sido cuidados en el Hospital para Elefantes, que fue construido por el grupo de Soraida en 1993. El centro trató a miles de elefantes, curándolos por infecciones en los ojos, heridas de bala y muchas otros problemas.
Motola resultó herida en 1999 mientras trabajaba en una zona de tala de árboles llena de minas terrestres tras medio siglo de lucha por grupos insurgentes. Su pata fue amputada y caminó con tres hasta que se colocó una especie de zapato temporal dos años después.