Cuando el elenco de Soy Luna se presentó por primera vez en Chile, hace poco menos de un año, la realidad era distinta. Por entonces, la serie juvenil musical de Disney Channel Latinoamérica, llamada a ser la sucesora del fenómeno Violetta, estaba recién estrenada en pantalla y su presentación en mayo en el Movistar Arena se realizó en el marco del espectáculo Radio Disney en Vivo. Pero ayer, en su regreso a suelo nacional, los jóvenes llegaron ya consolidados: dieron dos de las seis presentaciones que tienen fijadas para el mismo recinto del Parque O'Higgins, que continuarán con shows hoy y mañana (a las 12.00 y a las 16.00, entradas en Puntoticket). "El saber que ahora Soy Luna llega ya con un elenco establecido y con toda la serie detrás, es un paso muy grande, porque la vez pasada fue una presentación pequeña. Este nuevo show está hecho con mucho esfuerzo y amor. Para nosotros es como si fuera el primero y el último, y es hermoso ver como la gente ahora grita y se emociona", dice la mexicana Karol Sevilla (17), quien da vida a la protagonista de la historia.
"Hoy Soy Luna ya es un éxito internacional, que a todos nos tiene muy sorprendidos. Es entretenido como todos hemos ido creciendo con el proyecto. Acabamos de terminar de grabar la segunda temporada y creo que todos estamos distintos. Sabemos que hay mucha gente que nos quiere y que nos siguen de muchos países, y eso nos llena de orgullo", cuenta el actor chileno Jorge López (25), que en la serie interpreta a Ramiro. "Vimos que hay gente afuera del hotel esperándonos, a pesar de que hay lluvia. Recibimos mucho cariño de Chile", agrega el italiano Ruggero Pasquarelli (23).
Los shows de Soy Luna en Chile serán en el marco de las novedades de la producción de Disney, que el 17 abril estrenará su nuevo ciclo de episodios, y en marzo publicó el tercer disco con canciones originales, que acompañarán los nuevos capítulos. "Este es un elenco lleno de gente talentosa que no pierde la pasión por lo que hace, y la música es muy importante. Eso nos tiene muy entusiasmados", concluye Sevilla.