El embajador de España en La Paz, Ramón Santos, dijo hoy que la expropiación de la filial boliviana de Red Eléctrica Española (REE), anunciada por el Presidente Evo Morales, "fue una sorpresa, sin duda", y "no gustó" al gobierno de Mariano Rajoy.

"Es una medida que naturalmente no gustó a mi gobierno", dijo Santos a periodistas en el campo de gas natural Margarita, en el sur de Bolivia, donde Morales y el presidente de la petrolera española Repsol, Antonio Bufrau, tienen previsto inaugurar una planta procesadora esta jornada.

El embajador reconoció que "el gobierno de Bolivia puede adoptar una decisión de esta naturaleza", que cabe "dentro del ejercicio de la soberanía", pero a España le parece que la decisión "manda una señal negativa desde el punto de vista de la inversión, tanto nacional como extranjera".

"Una medida de este tipo genera desconfianza en el país a la hora de atraer inversiones extranjeras. Mi gobierno ha emitido ya un comunicado en el que dice que está analizando la situación y va a hacer el seguimiento de cómo evoluciona el caso y, en su momento, quizá haga un pronunciamiento", agregó Santos.

Según el diplomático, ahora lo deseable "es que ambas partes, empresa y gobierno, se sienten y negocien de buena fe una indemnización justa", e insistió: "Fue una sorpresa, sin duda".

"Es necesario aclarar cuanto antes el panorama jurídico inversor en Bolivia. Por eso llevamos tiempo subrayando la necesidad de que haya una ley de inversiones extranjeras (...) para que las empresas sepan en qué sectores deben poder invertir o deben poder moverse", agregó Santos.

Sobre las relaciones bilaterales, dijo que España ha "mantenido buenas relaciones con el gobierno (de Morales) a lo largo de estos años y queremos seguir manteniéndolas".

Red Eléctrica espera alcanzar un acuerdo con el gobierno boliviano para una compensación adecuada por la expropiación, dijeron a Efe en Madrid fuentes de la compañía.

Morales justificó la expropiación en que la inversión de la empresa fue escasa, pero las fuentes de la compañía afirmaron que desde la adquisición en 2002 de TDE, Red Eléctrica invirtió 60 millones de dólares para mantener y elevar los estándares de calidad de la red de alta tensión boliviana.

También dijo que reconocerá las inversiones realizadas por Red Eléctrica Española (REE) en Bolivia, poco después de tomar con militares sus oficinas en la ciudad central de Cochabamba.

La empresa española, al igual que diplomáticos españoles en La Paz, se declararon sorprendidos por la decisión.

Morales hizo el anuncio de la expropiación horas antes de inaugurar con el presidente de Repsol la segunda planta procesadora de gas del campo Margarita, en el sur de Bolivia, que permitirá aumentar las exportaciones a Argentina.