"Quisiera reiterar mi profunda molestia por las desafortunadas declaraciones de nuestro embajador en Montevideo, Eduardo Contreras". Con estas palabras, ayer el canciller Heraldo Muñoz, dio inicio a la declaración donde comunicó la decisión del gobierno de llamar al diplomático "inmediatamente a Santiago" para informar respecto de sus dichos en una entrevista con el periódico La Diaria de Montevideo.
Tras esto, el canciller aseguró que la decisión respecto de la permanencia del embajador dependerá de las explicaciones que entregue sobre lo que calificó como un "infortunado episodio".
"Aquí hay dos versiones. Yo tengo que hacer fe de lo que me dice el embajador, entonces por eso tengo que escuchar, que me dé explicaciones", dijo Muñoz.
Esto, luego que mediante un comunicado difundido el jueves, Contreras asegurara que sus palabras se habían realizado en una "conversación estrictamente privada con la periodista autora de la entrevista", lo que horas más tarde fue negado categóricamente por el medio de comunicación aludido.
Fuentes de gobierno aseguraron que este desmentido es el que causó mayor molestia, y que los partidarios en el Ejecutivo de mantener al abogado en su cargo y solo amonestarlo, fueron disminuyendo a partir de ese momento.
Las mismas fuentes confirmaron que el ministro Muñoz manifestó durante la jornada su inclinación por solicitar la renuncia de Contreras, situación que hasta última hora de ayer debía ser confirmada por la Presidenta Michelle Bachelet, con quien el canciller se contactó durante la tarde.
Mientras en el gobierno se analizaban los pasos a seguir, Contreras preparaba desde Montevideo los últimos detalles del viaje express que inició ayer a las 18:40 horas rumbo a Santiago, para aterrizar al país pasadas las 20.00. El detalle de los vuelos aportó algunas luces sobre la probable salida del jurista. Esto porque para el domingo a las 8.55 tiene programado volar de vuelta a la capital uruguaya, con lo que la reunión con el canciller debería realizarse hoy. Junto a esto, se suma la reserva de un nuevo vuelo de regreso a Chile, el que realizaría el martes después del mediodía.
Ayer en la mañana, previo a realizar su punto de prensa, el canciller Muñoz se comunicó telefónicamente con el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, para informarle la decisión del gobierno de convocar al diplomático a entregar sus explicaciones en persona.
Horas más tarde, al ser consultado respecto de una eventual remoción del embajador de su partido, Teillier declaró: "Es la Presidenta la que debe tomar la determinación y después verá a quién nombra embajador, ahora si ustedes me preguntan si me gustaría que fuera comunista, evidentemente que sí".
Los dichos del diputado PC sorprendieron en el oficialismo, quienes interpretaron sus palabras como un adelanto de la inminente salida de Contreras de su puesto. La intención, dijeron fuentes de gobierno, es que el abogado renuncie voluntariamente.