Centenares de personas y distintos cuerpos de bomberos del sector despidieron ayer a Hernán Avilés González, el bombero fallecido en Constitución al ser alcanzado por las llamas, tras haber rescatado a una familia del fuego.

Banderas a media asta, globos blancos, aplausos, sirenas encendidas y letreros con el rostro del nuevo mártir se podían apreciar en la plaza de Talagante. Fue en ese lugar donde sus compañeros y vecinos esperaron la llegada del féretro con los restos del malogrado bombero, mostrando su pesar por la pérdida de quien fuera también funcionario del Ministerio de Obras Públicas (MOP).

Durante el paso del féretro por la Plaza de Armas de la comuna, la gente brindó un fuerte aplauso como modo de homenaje al bombero fallecido, así como también a los funcionarios que despedían a su compañero entre lágrimas.

Uno de sus compañeros señaló con pesar "Es un gran dolor para todos los que combatimos los incendios forestales en este minuto. Un gran voluntario nos aguarda en el cuartel celestial".

Después, el carro de bomberos que trasladaba a Avilés se dirigió hasta la Primera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Talagante, lugar donde el joven se desempeñó por varias jornadas.

Allí los vecinos y familiares, lo calificaron como cercano y muy querido dentro de bomberos.

"Me siento tremendamente orgulloso por Hernán, él tomó la decisión que nadie toma: actuar", dijo enfático el alcalde de la comuna, Carlos Alvarez (PS). La autoridad agregó en su discurso que "Hernán ya no es sólo un héroe de Talagante, sino que también un héroe de todo Chile".