Los 102.000 empleados de France Telecom recibieron hoy un cuestionario sobre el estrés en el trabajo tras la ola de suicidios que afecta a la empresa de telecomunicaciones francesa.
Entretanto, hoy otra empresa involucrada en los mismos problemas, Renault, fue llevada a tribunales tras el suicidio de un ingeniero en 2006 que fue reconocido como accidente de trabajo.
La investigación en France Telecom comenzó tras el último suicidio en la empresa, el jueves pasado: fue el número 25 en menos de dos años.
Los empleados tendrán cuatro semanas para responder a poco más de 160 preguntas sobre diversos temas: cantidad de trabajo, reconocimiento, situación psicológica, apoyo entre los colegas, movilidad geográfica e interna. Los cuestionarios serán anónimos.
"Si responde al menos un empleado sobre dos, tendremos una base considerable para hacer evolucionar la situación", explicó Jean-Claude Delgennes, director del Instituto Technologia, que dirige la investigación. Los resultados no serán difundidos antes del 30 de noviembre.
Entertanto hoy Renault fue llevado a juicio por "error imperdonable" tras el suicidio de un empleado en 2006, un ingeniero que se había lanzado de un quinto piso.
En ese año otros ingenieros del centro de Guyencourt, en la región parisiense, también se habían suicidado.