SkyNRG, una firma proveedora de combustible sostenible de aviones que respalda Air France-KLM Group, planea vender a 10 líneas aéreas para fines de año conforme la industria de la aviación intenta eliminar las emisiones de dióxido de carbono para 2050.
La compañía aspira a que por lo menos una línea aérea de cada continente use su combustible limpio, dijo en entrevista telefónica Dirk Kronemeijer, director gerente de SkyNRG, que tiene sede en Ámsterdam.
Agregó que mantiene conversaciones sobre todo con líneas aéreas internacionales y con unas "pocas" compañías aéreas regionales.
El 1 de julio el organismo de lineamientos de los Estados Unidos, ASTM Internacional, dio su aprobación para que las líneas aéreas fletaran aviones de pasajeros utilizando kerosene mezclado con biocombustible fabricado a partir de desechos orgánicos y plantas no comestibles.
La aprobación permite una mezcla de hasta 50% de biocombustible, que puede incluir materias primas como jatropha, viruta de madera, aceite vegetal de desecho y algas.
SkyNRG ha proporcionado combustible desde entonces a Air France-KLM, la línea aérea más grande de Europa, Finnair Oyj y Thomson Airways Ltd.
"Estamos en un momento decisivo: si una oveja pasa el puente, las demás la seguirán", dijo Kronemeijer. "Si las líneas aéreas ven que sus competidoras lo hacen, todas querrán hacerlo".
SkyNRG, cuyos otros respaldos comprenden a North Sea Group Netherlands BV y a Spring Associates Inc., también aborda a "clientes empresariales multinacional" de los Estados Unidos y Europa que quieren que sus empleados vuelen en aviones con biocombustible, dijo Kronemeijer. No mencionó a las compañías.
Compartir costos
El combustible para aviones de fuentes renovables cuesta en la actualidad unas tres veces más que el combustible de kerosene tradicional.
SkyNRG aspira a reducir los costos de las líneas aéreas mediante la compra y producción del combustible a granel y la posibilidad de que líneas aéreas, aeropuertos, gobiernos y empresas compartan los costos, dijo Kronemeijer.
"Si no hubiera diferencia de precio, todas las líneas aéreas lo usarían, de modo que lo que hace falta es evitarles ese problema desde un primer momento", agregó.
"Estimamos que los costos se van reducir con rapidez, por lo que es probable que el año próximo cueste sólo el doble del combustible aéreo fósil".
La presión aumenta para que la industria de la aviación, que constituye el 2% de la emisión global de dióxido de carbono, reduzca la contaminación.
En 2012, las líneas aéreas que tengan rutas europeas tendrán que participar en el sistema de límites e intercambio de CO2 de la Unión Europea y deberán comprar permisos adicionales si exceden los límites acordados.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo, IATA por la sigla en inglés, fijó en 2007 un objetivo para la eliminación de las emisiones de carbono producto del transporte aéreo para mediados de siglo.
Boeing Co. y Airbus SAS, responsables de alrededor del 80% de los aviones de pasajeros del mundo, crean redes de aprovisionamiento que comprenden productores, refinerías, transportistas y distribuidores destinadas a llevar biocombustible a los aeropuertos.