En 48% disminuyeron las empresas multadas por emplear a extranjeros sin un permiso de trabajo en regla. Según información obtenida vía Ley de Transparencia, en 2014 fueron sancionadas 1.513 compañías, cifra que disminuyó a 789 en 2016 (ver infografía).
A decir de los expertos, son diferentes las interpretaciones que se pueden dar a este descenso. Algunos, sin embargo, no lo ven como una verdadera disminución de la empleabilidad informal de inmigrantes. "La Dirección del Trabajo se dio cuenta de que, como política de fiscalización, esto no valía la pena realizarlo, porque ocurre tanto que ya es imposible combatirlo", asevera Pablo Valenzuela, director Nacional del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM).
A esta postura se une José María del Pino, director ejecutivo de la Fundación Frè (que promueve la inserción social de los inmigrantes), quien considera que, además, el ente encargado de velar por el cumplimiento de la normativa laboral en Chile "carece de fiscalizadores para el masivo fenómeno que hoy existe".
Las cifras concretas, sin embargo, son positivas. El director regional de la Dirección del Trabajo Metropolitana Poniente, Jorge Meléndez, asegura que la fiscalización es regular y tiene por objetivo "revisar los aspectos laborales de cada persona, más allá de la situación jurídica migratoria".
En este sentido, sostiene que las fiscalizaciones aumentaron, de 967 en 2014 a 1.703 en 2016. Incluso, destaca que las multas a empresas también crecieron $ 500 millones en los tres años. No obstante, reconoce que la situación ha cambiado y que hoy los extranjeros "necesitan de una mayor presencia del Estado".
Apunta que "es una realidad que crece. Cada día nos encontramos con más extranjeros en las distintas áreas de trabajo". También asume la precariedad a la que se exponen estas personas. "Ellos están en una escala de vulnerabilidad laboral por remuneraciones y por la no cancelación de pagos previsionales, entre otros puntos".
El director del SMJ dice que como organismo "promueven que el extranjero tenga un contrato y trabaje apenas tenga los permisos". No obstante, asegura que los tiempos de espera que requieren los procesos a veces obligan a la informalidad. "Hay que ver la realidad. Si la demora de las visas puede llegar a los ocho meses, ¿qué hacen en ese lapso? ¿Cómo comen y pagan el arriendo?".
Para Del Pino, pese a que "la excesiva burocracia continúa siendo un problema", la creación de la visa por motivos laborales ha otorgado certidumbre en este aspecto.
"Hoy se pueden demorar uno o dos meses en recibir el primer permiso de trabajo, y hasta ocho con la visa, pero al menos esta nueva opción le ha generado más certeza al extranjero", sostuvo.
"Fue un acierto"
De la mano del descenso de empresas multadas, entre 2014 y 2016 se produjo también un aumento de 168% en la entrega de visas temporarias. El principal hito en este período es la creación de la visa por motivos laborales, que encabeza las solicitudes entre los 13 permisos transitorios, por encima de la visa Mercosur, para profesionales y técnicos, y por vínculo con chileno, entre otras.
La nueva norma, vigente desde el 1 de marzo de 2015, otorga autorización laboral por un año al presentarse un contrato de trabajo, prorrogable al término de este al acreditar el pago previsional. La diferencia entre este nuevo instrumento y la tradicional visa sujeta a contrato, permite cambiar de empleador. Esta diferencia ha disminuido la carga en la más antigua, la cual ha bajado drásticamente desde la aparición de la primera, cayendo de 74.865 en 2014 a 4.453 en 2016.
Para Pablo Valenzuela, de la Fundación Frè, la nueva visa "fue es un acierto, pero también una medida parche, no el tema de fondo".
La apuesta de las organizaciones es la creación de una visa multipropósito o de expectativa laboral, que permita a las personas buscar trabajo por un tiempo determinado, pero con "papeles al día". De todos modos, advierten que esta iniciativa figura en el proyecto de ley presentado por el gobierno. "Sobre el permiso para visitantes que se contempla, no se entiende cuáles son los requisitos para obtenerlo", critica el director del SJM.