Mientras en Chile poco a poco comienza a prender Santiago 2014, en Argentina están poco contentos con la organización de los presentes Juegos Sudamericanos.
En efecto, el portal Cancha Llena describe "lo que no se observa a simple vista: los continuos dislates de una competencia que hace todo lo posible por devaluarse debido a los permanentes cambios en sus reglamentos y en su calendario deportivo".
"La inestabilidad organizativa es habitual en los Odesur, pero se agudizó en esta cita, la número 10 de la historia. Hasta Brasil, la gran potencia sudamericana, estalló de bronca por los repentinos volantazos del Comité Organizador", continuó la publicación transandina.
"El lamento mayor, en verdad, es el dinero que se invierte y luego se echa a perder. En el Enard (Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo) se agarraron la cabeza por lo que sucedió con el voleibol. Con miras a los Odesur, este deporte se iba a jugar sin límite de edad (categoría libre), por eso es que se trabajó con el DT de entonces, Javier Weber, un 'equipo olímpico' Sub 23 al que pusieron de gira", sostiene la publicación.
Sin embargo, "en octubre pasado, los organizadores determinaron que los conjuntos participantes serían Sub 21. Y hace un mes y medio lo bajaron a un Sub 18". 'Así, no vayamos. Es una burla', amagaron en el organismo. Finalmente, Odesur volvió a proponer la categoría libre.
El lamento argentino radica que en Santiago 2014 "se pondrán en juego 316 oros en 35 deportes. Hace 4 años, en Medellín 2010 hubo 486 medallas doradas. Es decir, hay un 54% menos de posibilidades. Con este panorama, para la Argentina se disminuyen las posibilidades de acortar distancias respecto de Brasil y Colombia en el medallero. Es que se descartaron pruebas en donde nuestro país domina, como el remo o el windsurf".
En la nota, se cita a Mario Moccia, secretario general del Comité Olímpico Argentino: "Es un tema que debemos llevarlo a discusión en el seno de la Odesur (Organización Deportiva Sudamericana). Lo lamentamos profundamente por los atletas que se prepararon durante mucho tiempo para estos Juegos y ahora no podrán competir. El problema es que hay que revisar los cupos o los reglamentos. Nosotros colaboramos inscribiendo a algunos deportistas en pruebas que se caían, pero no todos hicieron lo mismo. El voleibol y el básquetbol estuvieron a punto de caerse por no llegar al mínimo de cinco países, aunque finalmente se cubrió el cupo y tendrán su competencia".