Enrique Osses volverá al terreno internacional. Después de dirigir el duelo entre Corinthians y Guaraní por la fase grupal de la Copa Libertadores, el árbitro nacional fue designado para el duelo entre River Plate y Cruzeiro, en la ida de los octavos de final del torneo continental, que se jugará en el Estadio Monumental de la capital trasandina.
La elección no pasó inadvertida ni en Argentina ni en Brasil, donde recordaron el historial de un juez que se ganó una incómoda reputación tanto en el medio local como en el extranjero.
En el portal Olé, por ejemplo, destacaron que estuvo a cargo de la "polémica" final de la Sudamericana 2012 entre Sao Paulo y Tigre. "Hace tres años, decidió suspender el partido en tierra paulista, luego de que el equipo argentino no salga a jugar el segundo tiempo y haber denunciado agresiones de la policía brasileña en el túnel. Finalmente, Sao Paulo fue campeón. Pero bueno. Esa es otra historia", recordó el sitio argentino, que reflejó la incomodidad de una decisión que llega cuando "donde la sensibilidad toca a la puerta" en el cuadro Millonario.
En tierras brasileñas también revisaron los antecedentes del chileno, y en Globoesporte reflotaron el "partido bizarro" que le tocó dirigir en 2009, en un duelo por la semifinal de la Copa Libertadores entre Cruzeiro y Gremio, cuando debió ser sustituído en el complemento por Jorge Osorio, otro nacional que se desempeñó como cuarto árbitro.
Osorio volverá a acompañar a Osses en el partido copero que se jugará este jueves.