Muy temprano en la mañana comenzó el proceso de traslado de reos peruanos, desde Arica a su país, en lo que se enmarca dentro de las medidas de la Ley de Indulto, que pretende disminuir la población carcelaria en Chile.
En caravana de buses de la Unidad de Servicios Especiales de Gendarmería, se trasladaron hoy a 122 reos peruanos, éste comenzó en Acha y llegarán al paso de Chacalluta.
Tal como informó ayer el ministro de Justicia Teodoro Ribera a La Tercera, hoy serán 122, mañana 14 quienes tiene condenas pendientes en Perú y el día jueves los otros 122 reos de esta nacionalidad.
Estos internos quedarán en libertad cuando entren a su país, no así los 14 que tienen causas pendientes. Entre los trasladados se encuentran mujeres con sus hijos pequeños y embarazadas.
Posteriormente, se realizará el mismo proceso con los reos bolivianos que alcanzan los 460; luego con 25 internos argentinos; 15 colombianos y 10 españoles.
En la ceremonia de traslado, participó el ministro Ribera, del Interior Rodrigo Hinzpeter y el director de Gendarmería Luis Masferrer.
El ministro Hinzpeter sostuvo que la operación constituye "un momento histórico", y considera "quizás las cuestiones más importantes que hoy día tocan a nuestra sociedad. En primer lugar, un combate en contra de la delincuencia y entendiendo aquello por ocupar nuestros espacios carcelarios para tener en ellos a los delincuentes realmente peligrosos, aquellas personas agresivas que constituyen un real y permanente peligro para nuestra sociedad".
"Es muy importante entonces que combatamos la delincuencia, que utilicemos bien nuestras cárceles para los reos peligrosos, para las personas y delincuentes que sean un peligro para la sociedad, y que entendamos también que los derechos humanos alcanzan a quienes cometan un delito, quienes pueden perder su libertad, pero no por ello pierden su dignidad", sostuvo el ministro.
