El margen de error es muy escaso en Castro. Apenas un par de días hay para preparar el contingente, que recibirá los primeros dos partidos de la serie final de la Liga Nacional de Básquetbol, entre los chilotes y Colo Colo.

Dentro de todos los aspectos, hay uno que tendrá un rol importante, la seguridad. Anoche se reunía el equipo con la organización de la liga, Carabineros y la Gobernación de Chiloé, para coordinar el dispositivo del fin de semana, pensando en la posibilidad de que llegue la Garra Blanca a la isla, para apoyar al Cacique.

Lo principal, aseguran, es evitar que sucedan los mismos incidentes que ocurrieron cuando Colo Colo visitó la Casa del Deporte, en el Biobío, por la semifinal ante la Universidad de Concepción. Esa vez, lanzaron bombas de estruendo y, según las denuncias, agredieron a los guardias de seguridad. Todo terminó en un castigo de 300 mil pesos a los albos, sanción que luego fue revocada por el Tribunal de Disciplina de la liga.

Hechos equivalentes son los que pretenden evitar este fin de semana en el Gimnasio Fiscal. "Viendo como se dio la otra llave, los dirigentes de Castro tomaron las providencias del caso para que no se repita lo que pasó en Concepción", asegura el vicepresidente de la LNB, Irán Arcos.

Así, se estudia el aumento de los guardias de seguridad en el recinto, y un fortalecimiento en el perímetro del Fiscal, con una revisión más exhaustiva a los asistentes de los dos partidos. "Queremos que esto sea una fiesta, y que se mantenga así en el rectángulo de juego", apunta Arcos.

Aspecto clave será la presencia de las parcialidades en el gimnasio. Mientras en Colo Colo afirmaron que iniciaron las gestiones para pedir entradas, y aseguraron que en el partido por la fase regular "a nosotros nos agredieron", por el lado chilote argumentan que no está definido el número de boletos que entregarían, ya que eso dependerá de lo que se decida con la Gobernación y Carabineros.

"En las bases existe la opción de que la visita pida un porcentaje de entradas, que es de un diez por ciento", dice Arcos, "pero habrá una preferencia para la gente de Castro". Incluso, la dirigencia no mira con malos ojos la idea que todos los encuentros de la final se jueguen sólo con público local. "Veremos si planteamos la propuesta, si es que la instancia se da...", reflexiona.

Esto, debido a la poca capacidad del Fiscal, que tiene un aforo del orden de los 1.500 espectadores. "El gimnasio tiene una cantidad limitada de ubicaciones, aunque han entrado más de dos mil personas, pero eso nos complicaría con los accesos. De todas maneras, ya está aprobada la reconstrucción", comenta Arcos, anticipando lo que se viene para el recinto castreño.

A tres triunfos de conseguir la segunda corona de la LNB, la demanda chilota por estar en los dos primeros partidos de la serie final ha sido alta. "Nos han pedido entradas de otras comunas para venir", dice Arcos, quien -además- es presidente del club chilote, reconociendo con cierto asombro la clasificación de Castro a la final. "Esperábamos estar entre los ocho mejores, pero esto nos pilló de sorpresa", concluye.