Todo indica que el ciclo de José Mourinho en el Real Madrid está llegando al final. Y según destacan en España, el desenlace es con el técnico totalmente distanciado de la mayoría del plantel. Incluso Pepe, uno de los más fieles a "Mou", se alejó del técnico al apoyar a Iker Casillas.

Según destaca Marca, al técnico sólo "le quedan tres incondicionales: Diego López, Essien y Modric. Con el resto la relación está deteriorada en mayor o menor medida y ninguna de las partes lo oculta".

Esta situación generó las declaraciones del presidente del club, Florentino Pérez, destacando el compromiso del grupo para la última etapa de la temporada, que incluye la final de la Copa del Rey.

La última etapa del quiebre se desató en la semifinal de la Liga de Campeones ante el Borussia Dortmund. Nuevamente los jugadores se molestaron con algunos comentarios públicos de Mourinho, como que "en Dortmund jugamos como si fuera un amistoso. El fútbol fue justo porque ganó quien lo mereció y perdió quien mereció perder".

Entre el 3-0 de la ida y la revancha, "Mou" declaró que "para motivar a la afición hacía falta un resultado diferente en Dortmund. Yo no motivo con videos".

El medio español apunta a que "hoy se pasan factura unos y otros. El Real Madrid se quedó a un gol de acceder a la final y, mientras Sergio Ramos lloraba de rabia en el césped, consolado por Iker Casillas y otros compañeros, Mourinho se metía al vestuario maldiciendo, todavía, el partido de ida. No se lo quita de la cabeza ni perdona a sus jugadores lo "inocentes".

Los jugadores trataron de no aumentar la polémica, aunque Cristiano Ronaldo dijo que no le importaba la decisión de Mourinho respecto de si quedarse o no en el Real Madrid.

En la previa del duelo del fin de semana, aumentó la molestia del vestuario, con el "desahogo del entrenador portugués, el día antes de jugar contra el Valladolid, señalando a Casillas y a Cristiano se entendió como un menosprecio y un desprestigio a dos símbolos".

Y en el partido, el DT se quedó sentado, sin dar instrucciones. Lo que tampoco hizo en el descanso.