Cristiano Ronaldo ha evitado pagar impuestos a la Hacienda de su país por el contrato de cesión de su imagen al Banco Espíritu Santo (BES) durante los años 2013 y 2014, según informaron medios portugueses.

De acuerdo al diario portugués Correo da Manhá, que menciona esta "finta" al fisco luso, por este contrato que se firmó a finales de 2012 el atacante de Real Madrid percibió 1,3 millones de euros, a razón de 60.000 por cada uno de los dos años de vigencia. Nada anormal hasta ahora.

El medio explicó que el contrato gestionado por la empresa de Jorge Mendes que lleva su representación (Gestifute) fue firmado con la empresa irlandesa Multisports & Image Management (MIM).

De esta forma, Ronaldo abonó los impuestos correspondientes al contrato en Irlanda, donde tuvo que pagar el 12,5% de sus ingresos. Por qué: Si hubiera cotizado en Portugal, tendría que haber abonado el doble, ya que en ese caso la cotización habría alcanzado el 25% de sus ingresos.

La relación entre Ronaldo y el Banco Espíritu Santo se remonta a 2003.