El Octavo Juzgado de Garantía de Santiago determinó dejar en libertad y con medidas cautelares de menor intensidad al cabo 1° de carabineros, Robinson Medina, quien fue formalizado por el delito de trata de blancas.
La Fiscalía Metropolitana Oriente imputó al funcionario de la SIP de la 19° Comisaría de Providencia el haber prestado colaboración a un ciudadano argentino que traía mujeres extranjeras para ejercer la prostitución.
La investigación contra el uniformado se prolongó durante más de un año y en ella se registraron escuchas telefónicas donde se acreditaba la relación entre Medina y el ciudadano argentino.
A la salida del tribunal el efectivo policial descartó las acusaciones de la fiscalía y señaló que sus contactos con el extrajeron eran parte de una estrategia de la investigación policial.
El Ministerio Público anunció que apelará para revertir la libertad del efectivo policial.
