La misión militar de las fuerzas internacionales de apoyo en Afganistán se está volviendo cada vez más riegosa.  La muerte de cuatro militares franceses por un soldado afgano elevó a diez la cifra de víctimas de la  OTAN en territorio afgano en 24 horas.

En el cuartel general de la Fuerza Internacional de  Asistencia a la Seguridad (ISAF), la tensión subió porque los cuatros soldados franceses muertos hoy se agregan a los seis estadounidenses que murieron en el accidente de un helicóptero, probablemente abatido por talibanes, en la provincia meridional de Helmand.

Con estas últimas muertes, son 28 los militares extranjeros muertos en enero, cuando todavía faltan diez días para el  término de mes, es decir cercano a los 32 registrados en todo enero de 2011. Ello sin contar los tres contratistas  estadounidenses muertos en otro accidente de helicóptero el lunes pasado.

Los talibanes no combaten ya a los militares de la ISAF sobre el terreno abierto. Pero es evidente que tienen una enorme capacidad de ataque a través del uso de kamikazes, explosivos y  armas ligeras y pesadas, detalla Ansa.

En sus ataques, dijeron recientemente el presidente, Hamid  Karzai, y el general John Allen, mueren muchos civiles, pero  también son notables sus daños a la Coalición, en términos de  víctimas y de destrucción.

La acción del soldado -o talibán infiltrado, es poco claro  todavía- demuestra otra vez que entre el Ejército Nacional  Afgano (ANA) hay un profundo hastío hacia los miembros de la  Coalición internacional. Episodios así hay varios en el pasado. Sólo en 2011, al menos  una veintena de militares de la ISAF murieron por "fuego amigo".

Ello, por los soldados que miran con odio la presencia de  extranjeros en Afganistán. También, por la indudable capacidad  de los talibanes de infiltrar a sus hombres entre la policía y  el ejército nacional.

El episodio más sonado de los últimos meses fue el fuego  abierto en el aeropuerto de Kabul el 27 de abril de 2011, cuando  un afgano con uniforme disparó y dio muerte a ocho militares y  un contratista estadounidense. Estos episodios tuvieron a menudo como escenario bases en las  que la ISAF tiene contacto con las fuerzas de seguridad afganas.

Los altos mandos militares extranjeros ya pidieron a Kabul  que ejecuten minuciosos controles antes del reclutamiento de  efectivos.

EEUU Y EL PENTAGONO
La Casa Blanca y el Pentágono coincidieron hoy en señalar que la decisión de la marcha de las tropas galas de Afganistán corresponde sólo al Gobierno de Francia.

En su conferencia de prensa diaria, el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney, indicó: "nuestros pensamientos y oraciones están con el pueblo francés y las familias de quienes perdieron seres queridos en este trágico incidente".

"Francia es un valioso aliado y un amigo apreciado de Estados Unidos y reconocemos su contribución a las operaciones de la OTAN, particularmente en Afganistán", añadió Carney.