Un complicado momento es el que vive el delantero de Universidad Católica, Sebastián Barrientos, luego que se le diagnosticara un tromboembolismo pulmonar, afección que incluso lo podría obligar a dejar el fútbol.
La situación de inmediato generó amplia preocupación en el cuerpo médico y dirigencia de la UC, especialmente en el presidente Jorge O'Ryan, quien acaba de arribar al país procedente de Estados Unidos.
"Recién llegué al país y de inmediato me voy a poner en contacto con los médicos del club, pero hay que ser positivos en el tema y esperar la determinación definitiva", especificó a latercera.com.
"Siempre hemos estado al lado de nuestros jugadores, como fue el caso de José María Buljubasich (tumor en el cerebro) y el de Facundo Imboden (rotura de ligamentos de la rodilla). Esta no será la excepción, pero esperamos que todo resulte bien para el jugador, por lo que sólo resta darle el apoyo necesario a él y su familia", sentenció.
El médico Cristián Fontboté ratificó ayer la afección que sufre el jugador, pero aseguró que ha evolucionado de la mejor manera.
"Sebastián tiene una tromboembolia pulmonar, que consiste en el desprendimiento de un coágulo desde la extremidad inferior al pulmón. Ahora está fuera de peligro. Se encuentra bien y estable, y con el ánimo un poco mejor", dijo.