Dirigentes políticos y responsables de clubes de fútbol uruguayos estarían involucrados en delitos cometidos por las barras bravas de los equipos de su país, según revela una investigación judicial que fue difundida hoy por varios medios del país sudamericano.

La filtración de este sumario judicial, publicado al menos por dos periódicos y un medio digital, no da los nombres de ninguno de los implicados, si bien asegura que esas figuras estuvieron involucradas en delitos como la venta de armas a hinchas violentos, que también cometieron otros crímenes como el tráfico de droga, traslados fuera del país de personas buscadas por la Justicia y violación de las normas del transporte internacional.

El diario El Observador relata que la Justicia tiene ya pruebas sobre estos casos, fruto de la labor de inteligencia que el Gobierno uruguayo lanzó en el seno de las hinchadas violentas, lo que según dijeron fuentes de la investigación al periódico dio "resultados más sorprendentes de lo esperado".

Las mismas fuentes anunciaron que en breve se tomarán "inminentes medidas" sobre estas acusaciones y que se producirán "decenas de citaciones de dirigentes del fútbol, gente allegada a los clubes, empresarios, líderes de las hinchadas, "si algunas pruebas se consolidan, hasta un dirigente político".

Esta investigación llevó casi un año, en el cual la policía obtuvo informantes y se interceptaron, obtuvieron informantes e interceptaron llamadas telefónicas, pruebas "contundentes" respecto a los dirigentes de un club.

La dimensión del asunto es de tal calado que la Policía considera como "crimen organizado" las prácticas detectadas, con una enorme connivencia entre directivos e hinchadas.

La investigación comenzó en 2013 después de que una intervención policial por un caso de drogas en casa de un miembro de la hinchada del club Peñarol, que contaba con seis antecedentes penales, se encontrara con 50 entradas de cortesía para ver al equipo en Argentina frente a Vélez Sarsfield por la Copa Libertadores.

Por su parte, el diario El País añadió que la policía constató que entre los barras bravas uruguayos hay muchos condenados por diversos delitos y que estos se encuentran organizados con medios logísticos, cuentan con jerarquías internas y planifican sus acciones.

El propio juez Homero Da Costa, que instruye la investigación, se refirió hoy las filtraciones en declaraciones a la página web Montevideo Portal y señaló que éstas "perjudican toda la investigación"

"Tengo un dolor enorme, porque se esfuma todo el esfuerzo que uno hizo durante casi dos años, tratando de meter mano en este tema de las barrabravas. Es horrible, me siento como si hubieran entrado a mi casa", afirmó el juez.