Glenda Rojas, una enfermera de 45 años en la Clínica San José de Arica, terminó su turno ayer a las 20.30 horas y le pidió a su compañera que la esperara para irse juntas del trabajo mientras ella iba al baño, pero nunca llegó al encuentro y su amiga se fue sola a su casa.

Sólo hasta hoy en la mañana otra funcionaria del centro asistencial la encontró tirada en el baño sin signos vitales.

Funcionarios de la Brigada de Homicidios de Arica esperan el resultado de la autopsia de la mujer, para determinar las causas del deceso.

El jefe de la BH de Arica, comisario Carlos Olivares informó a La Tercera, que hasta el momento "no hay antecedentes que acrediten la participación de terceros en la muerte de la mujer".

Los resultados de los análisis toxicológicos podrían estar mañana, lo que ayudarían a dilucidar el origen de la muerte de la enfermera.

La Clínica San José, a través de un comunicado sostuvo que "cada uno de sus funcionarios se encuentran profundamente conmovidos ante el lamentable fallecimiento de Glenda Rojas y le hacen llegar sus más sinceras condolencias a su familia, acompañándola en el dolor que provoca la partida inesperada de un ser querido".