La búsqueda de los restos del avión ruso que se estrelló el domingo en el mar Negro permitió encontrar el martes la principal caja negra del aparato, un elemento esencial para determinar las causas del siniestro.
El Tupolev Tu-154 se estrelló justo después de despegar de la estación balnearia de Sochi (sur) cuando viajaba rumbo a Siria con 92 personas a bordo, entre ellas más de 60 miembros del Coro del Ejército Rojo.
Las autoridades rusas parecen haber descartado la hipótesis de un atentado y privilegian la de un accidente causado por un error humano o un fallo técnico.
La labor del equipo de búsqueda, unas 3.500 personas que trabajan día y noche en la zona de la catástrofe, ya había permitido encontrar varios pedazos del avión, pero el hallazgo de la caja negra es una etapa primordial para entender lo ocurrido.
"La principal caja negra fue encontrada a las 5H42 hora local en Moscú (02H42 GMT) a 1.600 metros de la costa, a una profundidad de 17 metros", precisó el ministerio ruso de Defensa, citado por agencias locales.
El registrador de vuelo será trasladado a la región moscovita para ser analizado por especialistas, según las mismas fuentes.
Según una fuente citada por la agencia Interfax, la caja negra encontrada, "en buen estado", es la que guarda los parámetros técnicos del vuelo y no las conversaciones en cabina.
Los investigadores seguían buscando este martes otra caja negra, así como los cuerpos de las personas que viajaban a bordo.
"Hasta el momento, se han encontrado 12 cuerpos y 156 fragmentos de cuerpos", indicó el ministerio de Defensa.