En las cercanías de la residencia de campo de la reina Isabel II, donde la familia real celebró Año Nuevo, se encontraron restos humanos que al parecer serían de una misma persona, informó hoy la policía. Un individuo que caminaba ubicó los restos en el bosque que rodea Sandringham y alertó a los efectivos. Desde Palacio se señaló que se trata de un asunto policial sobre el que no se va a pronunciar.
La reina Isabel II y su familia suelen pasar las vacaciones de Navidad y Año Nuevo en Sandringham, en el ducado de Norfolk. La propiedad está rodeada de varias miles de hectáreas de bosque y campos, que en su mayoría están cedidos a campesinos para que los trabajen.
El diario The Daily Telegraph informó que los restos fueron hallados poco después de que la Reina y su marido, el príncipe Felipe, acudieran a la iglesia en Sandringham. La policía hizo todo lo posible para no levantar ningún tipo de atención mediática sobre la investigación. El lunes la Reina dio un paseo por su propiedad. Los vecinos indicaron al diario que el área sólo es visitada por los residentes de las inmediaciones.
La policía no dio detalles del hallazgo. Mientras, prosiguen las investigaciones. El diario británico recordó el caso del año pasado, en el que cerca del palacio de Buckingham, en Londres, fue hallado un cadáver. Se trataba de un hombre que acosaba a la Reina desde hacía años con cartas. Su cadáver permaneció tres años sin ser descubierto.