Una de las enfermeras que trabajaba como telefonista del hospital londinense donde estaba ingresada la esposa del príncipe Guillermo, Kate Middleton, y que fue víctima de una broma de una radio australiana, apareció hoy muerta en su domicilio, a pocas cuadras del Hospital King Edward VII de Londres.
La mujer, identificada como Jacintha Saldanha, madre de dos hijos y quien llevaba cuatro años en la clínica, contestó el miércoles pasado la llamada de Mel Greig y Michael Christian que se hicieron pasar por la reina Isabel II y el príncipe Carlos, y a los que se informó sobre el estado de la duquesa de Cambridge, ingresada el lunes por fuertes náuseas provocadas por su embarazo.
La policía no ha confirmado la causa del fallecimiento de la empleada pero la tesis habla de un posible "suicidio", según consigna el diario británico The Daily Mail.
El medio detalla que el cuerpo inconsciente de la mujer fue ubicado cerca de las 9.30 horas y de inmediato se avisó a personal de salud que llegó al lugar. Intentaron reanimarla pero no pudieron salvar su vida.
Tras conocer lo ocurrido el duque y la duquesa de Cambridge, manifestaron en un comunicado que estaban "profundamente entristecidos" por la muerte de la enfermera.
La declaración del St. James Palace, agrega que tanto Kate como el príncipe Guillermo afirmaron que "nos cuidaron maravillosamente bien en todo momento en el King Edward VII Hospital, y que sus pensamientos y oraciones están con la familia Jacintha, amigos y compañeros en este momento tan triste", de acuerdo con la cadena BBC.
Un vocero del palacio luego agregó que "en ningún momento el palacio quejarse al hospital sobre el incidente".
LA BROMA
La controvertida llamada de la radio australiana 2Day FM fue la siguiente:
"¿Podría, por favor, hablar con Kate, mi nieta", preguntó a la central del hospital la locutora Mel Greig forzando la voz, según la grabación.
- "Por supuesto, no cuelgue, Señora", le respondió la operadora.Mientras esperaban, el otro locutor, Michael Christian, comentó incrédulo: "¿Nos pasan. Si funcionaserá el engaño más fácil que hayamos montado jamás".
Una enfermera descuelga poco después y le responde a la "reina" que Katea "duerme y ha pasado una noche tranquila". "La hemos rehidratado porque estaba muy deshidratada cuando llegó, pero a esta hora está estable", agrega.
- "Bueno, entonces voy a dar de comer a mis corgis (los perros de la reina)", responde la falsa soberana, mientras sus compañeros ladran en el estudio.
- "¿Cuál es el mejor momento para venir a verla", retoma la "monarca", preguntándole al "príncipe Carlos" cuándo podrá llevarla al hospital.
- "Lo mejor será a las 09.00, después que que pase el médico", sugiere la enfermera antes de precisar que Catalina no ha tenido "tenido ninguna arcada" durante su turno.
Horas después del incidente la radio se disculpó a través de Twitter por "las molestias" que pudo causar con esta broma, "hecha con las mejores intenciones, y envió sus "mejores deseos" a Kate y su familia.
El hospital en una declaración destacó la eficiencia de Saldanha y aclaró que nunca le aplicó alguna amonestación disciplinaria tras el incidente del miércoles.