Hasta la comuna de Pudahuel llegaron los precandidatos de la Nueva Mayoría por el sillón presidencial, Ricardo Lagos y José Miguel Insulza, para asistir a la asunción del edil Johnny Carrasco, militante PS que fue reelecto en la comuna por cuarta vez consecutiva.
El encuentro de ambas cartas presidenciales estuvo marcado por las declaraciones cruzadas sobre el futuro de la Ley Reservada del Cobre, controversia que ha incomodado la relación entre el PS y el PPD.
Luego de que el ex agente ante La Haya reiterara su apertura a derogar la ley, el ex Presidente aseveró que dicho planteamiento "suena un poquito a demagogia".
"El decir 'derogo la ley reservada del 10%… Sí, puede ser, yo he dicho muchas veces que es un anacronismo, pero eso no va en un contexto para llamar la atención (…). Suena un poquito a demagogia. Yo prefiero hacerlo de una manera distinta", dijo Lagos.
Pocas horas después, Insulza respondió a sus palabras recordando que el presidente del directorio de Codelco, Óscar Landerretche, quien es uno de los economistas más cercanos al ex mandatario, está a favor de derogar la normativa. "No conozco a nadie en Codelco que crea que la Ley Reservada del Cobre es una buena idea". Acto seguido, agregó: "Yo conozco a Óscar Landerretche, tengo una muy buena impresión de él y creo que no es un demagogo, ni mucho menos".
Las declaraciones de ambos se sumaron a críticas anteriores que se han lanzado en los últimos días, lo que ha marcado una distancia y ha tensionado el escenario presidencial en el sector.
En este contexto, en la ceremonia en Pudahuel, Insulza desestimó la controversia y aseguró que "no se prestaría" para dicha disputa.
"Es un debate que no existe con el presidente Lagos y no me voy a prestar para eso", afirmó el ex ministro, añadiendo que "lo aprecio mucho, fui su principal colaborador, él fue gran Presidente de la República. No tengo diferencias con él".
Por su parte, Lagos indicó que "tenemos una relación absolutamente normal entre personas que hemos trabajado durante largo tiempo juntos".
Sobre su calificación de "demagogia", el ex mandatario explicó que se refería a que "decir las cosas al voleo, sin contextualizar, no me parece adecuado".
"No tengo interés en marcar diferencias con nadie, estoy interesado en poner temas e ideas concretas, y que la ciudadanía juzgue. No soy yo el que tiene que hacer comentarios de ninguna de aquellas personas que están postulando a distintas situaciones en el país. Una campaña presidencial es una campaña sobre propuestas, de idea. Cada uno se hace cargo de lo que dice".