Un amplio apoyo a la restricción vehicular permanente en Santiago, muestra la Sexta Encuesta del Centro de Investigación para la Sustentabilidad de la U. Andrés Bello, la que fue aplicada en las ciudades de Santiago, Valparaíso y Concepción, con el objetivo de conocer la percepción de la población sobre el medio ambiente.
Según el estudio, una de las medidas en favor del medio ambiente con alto respaldo es la aplicación de restricción a vehículos con sello verde previos a 2012, de manera permanente, cuando hay episodios críticos de contaminación del aire. Así, en Santiago las personas calificaron con una nota 4,1 la disposición (en una evaluación de 1 a 5).
La idea de poner en marcha esta normativa toma fuerza, pues se espera que el próximo 1 de mayo comience a regir el Plan de Descontaminación en la Región Metropolitana, que incluye la paralización, cada día, de más de un millón de vehículos, documento que está en proceso de aprobación en la Contraloría.
En el sondeo se consultó a las personas qué opciones tomarán en el caso de que haya prohibición de circular en vehículo en episodios críticos. El 21% de los encuestados señaló que viajará en transporte público como alternativa.
Otro 15% de las personas afirmó que tiene un automóvil posterior a 2012 (por lo que no se verá afectado por la prohibición) y sólo el 8% de los participantes señaló que cambiará su vehículo por uno más nuevo para no tener que dejar su automóvil en la casa, mientras que un 56% dijo no tener automóvil.
"La futura medida ha sido tomada bien por la población en Santiago. Eso se ve en que la mayoría asume que deberá ocupar los medios de transporte alternativos cuando estén afectos", dijo Claudio Soto, director del Centro de Investigación para la Sustentabilidad de la U. Andrés Bello.
"La ciudadanía se ha dado cuenta de que cuando hemos tenido estas restricciones (...) tenemos que hacer un esfuerzo y eso está reflejado en ese apoyo", agregó el intendente metropolitano, Claudio Orrego.
En tanto, el ministro del Medio Ambiente, Marcelo Mena, consultado por el apoyo a la medida, señaló que no se referiría a ningún aspecto del plan antismog de la capital.
Transportes
Aunque los encuestados declararon que utilizarán la locomoción pública si tienen restricción vehicular, Julio Villalobos, director del Centro de Transporte y Logística de esa casa de estudios, indicó que hay dudas sobre cómo "responderá la oferta del transporte público si ello sucede", tomando en cuenta los malos indicadores del Transantiago y la red Metro. "Esto va a generar mayor nivel de uso, por eso debe ir de la mano de medidas que incrementen la capacidad y frecuencia de los buses y metro, si no va de la mano con eso, podría generar atochamientos en el sistema de transporte público", añadió.
Los resultados de la encuesta muestran que en Santiago, el 36% de los consultados dijo utilizar el Metro como principal modo de transportes, por sobre los buses, que tuvieron un 27% de las preferencias. En Concepción, en tanto, un 62% de los usuarios consultados afirmaron que circulaban en microbuses.
Otra área que abordó la encuesta fue el uso de la bicicleta. El 26% de las personas dijo circular en ella, un 23% lo hace en Concepción y apenas a un 16%, en Valparaíso. Ante esto, Villalobos explicó que su preferencia es "para un cuidado personal más que por una conciencia ambiental".
La cobertura de ciclovías, en tanto, fue evaluada como "regular" en Santiago y Concepción (44% en ambos casos) y como "mala" en Valparaíso (49%). Los participantes en la investigación consideraron clave la calidad de esas sendas.
Planes
En el estudio también se le preguntó a la población sobre si las medidas para disminuir la contamimación del aire eran suficientes, a lo que el 93% respondió que no. Y en cuanto a otras iniciativas para rebajar los niveles de material particulado en las cuencas, la población, apoyó las diversas propuestas que se han impulsado durante el último año, como la prohibición del uso de leña para calefacción y las quemas agrícolas durante el invierno.
Además, un 84% de la población afirmó que era "ineficiente" el sistema de pronóstico de la calidad de aire, mediante el cual se dictan alertas, preemergencias y emergencias. En Santiago, un 84% de los consultados evaluó mal el modelo; en Valparaíso un 88% y en Concepción el rechazo llegó a 83%.