Al menos un miembro de las fuerzas especiales ucranianas murió y cinco soldados resultaron heridos en la ciudad oriental de Slaviansk, en una "operación antiterrorista" para dispersar a los separatistas prorrusos de los edificios ocupados, señaló hoy el ministro del Interior en funciones, Arsen Avakov.
Según Avakov, no se conocen las bajas entre la resistencia prorrusa.
Se trata del primer enfrentamiento armado que se reporta en esta región ucraniana, donde uniformados prorrusos han tomado varios edificios del gobierno local en días recientes.
Un portavoz de los separatistas dijo a la televisión estatal que los activistas no cederán.
El gobierno pro-occidental de Kiev ordenó la intervención de unidades especiales después de que los separatistas ocuparan en Slaviansk, situada a unos 100 kilómetros al norte de la industrial Donetsk, varios edificios públicos.
Según el ministro, los activistas dispararon sin que mediara advertencia contra los escuadrones especiales. Avakov acusó también a las fuerzas prorrusas armadas de utilizar a la población como escudos humanos.
El gobierno instó a los habitantes a quedarse en sus casas por motivos de seguridad y no abrir las ventanas. Testigos aseguraron que la situación es tensa y que el aire de la ciudad está lleno de humo, pues manifestantes incendiaron neumáticos delante de las barricadas.
La agencia Itar-Tass especula con que el tiroteo se produjo en puestos de control que habían levantado los separatistas a las afueras. Helicópteros militares sobrevolaban la ciudad de unos 100.000 habitantes.
"En Slaviansk comenzó una operación antiterrorista. Fueron trasladadas fuerzas de todas partes del país. Que Dios esté con nosotros", escribió Avakov en su cuenta de Facebook.
El ministro del gobierno pro-occidental acusó a Rusia de agresión en la región este, donde la mayoría de la población tiene raíces rusas.
El ministro del Exterior ruso, Serguei Lavrov, rechazó las acusaciones y reiteró que una intervención violenta por parte de Kiev pone en peligro el encuentro previsto para este jueves en Ginebra para negociar, con representantes rusos, ucranianos, estadounidenses y de la Unión Europea (UE).
Atacantes armados y vestidos con trajes de combate tomaron el sábado la central de la policía y la sede del servicio secreto en Slaviansk, al grito de "¡Rusia, Rusia!". También en otras localidades de la región de Donetsk los manifestantes ocuparon edificios administrativos.
Avakov señaló que también fueron atacados cuarteles de la policía en otras ciudades de la región, como Kramatorsk y Krasny Liman.
En Yenakiyevo, la ciudad natal del destituido presidente ucraniano Viktor Yanukovich, los separatistas tomaron hoy la central de la policía y el ayuntamiento.
En Mariupol, los separatistas tomaron bajo su control edificios públicos, mientras en Donetsk, Járkov, Lugansk y otras ciudades miles de personas se manifestaron a favor de una federalización del país.
Desde hace semanas, las fuerzas prorrusas exigen unirse a la Federación Rusa siguiendo el modelo de la península de Crimea o como mínimo un referéndum sobre una mayor autonomía.
En una conversación telefónica con Serguéi Lavrov, el secretario de Estado norteamericano John Kerry "expresó su profunda preocupación" de que los ataques "fueran orquestados y sincronizados, de forma parecida a los ataques anteriores en el este de Ucrania y Crimea", según el Departamento de Estado. Kerry "dejó claro que si Rusia no adopta medidas para disminuir la tensión en el este de Ucrania y retira de la frontera ucraniana sus fuerzas, habrá consecuencias adicionales", indicó el departamento.
La cancillería rusa contradijo las afirmaciones de Kerry, mientras que Lavrov atribuyó la crisis de Ucrania al fracaso del gobierno ucraniano "por no considerar las necesidades legítimas y los intereses de los rusos y de la población de habla rusa". Lavrov advirtió además que Rusia podría retirarse de la conferencia de la próxima semana sobre la crisis ucraniana si Kiev emplea la fuerza contra "los residentes del sudeste llevados a la desesperación".
El Ministerio de Exteriores ruso anunció un viaje de Lavrov a China para hablar, entre otros temas, de Ucrania. Rusia y China suelen votar juntas en el Consejo de Seguridad de la ONU. En la crisis de Crimea, sin embargo, China se abstuvo.