Decenas de palestinos se enfrentaron hoy a la policía israelí en el barrio de Ras el Amoud, en el este de Jerusalén, tras los rezos del viernes, dejando varios heridos, informaron fuentes médicas y locales.
Los palestinos habían convocado una jornada de venganza para protestar por los intentos de los extremistas judíos de rezar dentro de uno de los lugares más sagrados del islam, la Mezquita de Al Aqsa, en la ciudad vieja de Jerusalén. Los judíos creen que en el lugar se encuentra también el viejo templo de Salomón.
Fuentes médicas hablaron de al menos cinco personas que están siendo tratadas por inhalación de gas lacrimógeno y golpes, después de que la policía atacara a los palestinos que bloqueaban la carretera principal para evitar que los funcionarios los arrinconaran en un callejón cercano.
Los palestinos lanzaron piedras en los barrios de Wadi el Joz y Sur Baher.
En el norte de la ciudad, se enfrentaron a soldados isarelíes en el puesto de control de Qalandia, a lo que los soldados respondieron con gases lacrimógenos. De momento no hay información sobre heridos.
Al Fatah, el partido del presidente palestino, Mahmud Abbas, convocó para hoy una huelga general en Cisjordania y la Franja de Gaza para protestar contra las medidas israelíes en Jerusalén, después de que la policía israelí restringiera esta semana la entrada de fieles musulmanes a la mezquita de Al Aqsa alegando que se intentaba evitar disturbios.
Sólo permitió la entrada de hombres mayores de 50 años y mujeres de todas las edades residentes en Jerusalén este, lo que restringuió el número de fieles en el rezo del viernes a sólo 7.000 personas.
Cientos de palestinos siguieron en llamamiento de Al Fatah y salieron a la calle en ciudades cisjordanas exigiendo la protección de Jerusalén de las medidas israelíes que la convertirán en predominantemente judía.
En la Franja de Gaza, controlada por Hamas desde junio de 2007, los palestinos marcharon también en varias ciudades en apoyo de Jerusalén.
Las protestas se extendieron a Jordania, donde miles de personas salieron a las calles de Amán y otras ciudades para protestar contra las medidas israelíes.