En la Plaza de Armas de Santiago, el candidato del PRO, Marco Enríquez-Ominami dijo que en los días previos a las elecciones "vamos a hacer un esfuerzo para decirles a los chilenos que no existe un casi cambio, que no existe la casi reforma tributaria, que no existe casi Asamblea Constituyente o la casi sala cuna digna".
"En el voto no va a estar el 'casi', van a estar los proyectos, con nombre y apellido, y yo les propongo a los chilenos en estos últimos días, antes del inicio de la segunda vuelta, que nos den una oportunidad de debatir con Michelle Bachelet en segunda vuelta, sin intermediarios", manifestó.
Junto con ello, el candidato emplazó a sus contendores: "A 6 días de las elecciones, cuando todos parecen creer que hay que hablar de intervencionismo y acusaciones, nosotros no perdemos nuestro foco que es la educación", dijo.
"Se acusan de intervencionismo y gasto electoral mientras un 43% de los jardines infantiles no cumple con los estándares mínimos y la mitad no tiene estrategias para prevenir el abuso infantil", agregó.
Sobre la educación preescolar, el candidato recalcó que "hay que hacer obligatoria la certificación de las salas cunas, ya que más de la mitad vive bajo esta sombra".
"Planteamos que las salas cuna no queden sometidas a la exigencia de que exista un mínimo de 20 trabajadoras por empresa, se trata de un derecho de los niños; habiendo madres con niños menores de 2 años tendrá que haber sala cuna, y que sea con cargo al padre y la madre", enfatizó.