Para conmemorar los 35 años de la muerte de su padre, Marco Enríquez-Ominami, visitó esta mañana el Cementerio General.
Junto a sus hijas, Fernanda y Manuela, y a su esposa Karen Doggenweiler, el candidato independiente llegó a la tumba del ex líder del MIR, Miguel Enríquez, fallecido en 1974 tras un enfrentamiento con agentes de la DINA.
En una ceremonia íntima la familia dejó claveles y rosas rojas en el nicho, donde además recordaron la historia del fallecido dirigente.