Hasta ayer, Marco Enríquez-Ominami había evitado dar una respuesta taxativa cuando se le consultaba por su respaldo a Eduardo Frei en una eventual segunda vuelta de la elección presidencial. Pero en medio de su visita a Argentina, el diputado afirmó que si no es él quien pasa al balotaje, no brindará su apoyo al senador DC.

"Ni lo sueñen. Si el que pasa a la segunda vuelta es Frei, no lo vamos a apoyar", remarcó el parlamentario, en un reportaje publicado por el diario transandino La Nación, donde se relata la irrupción del presidenciable independiente, su renuncia al Partido Socialista y su conflictuada relación con la Concertación.

Su afirmación es otro dardo que ha desplegado contra el candidato oficialista durante la campaña y que se agudizó tras la última encuesta CEP publicada a comienzos de septiembre, donde Enríquez subió cuatro puntos porcentuales en intención de voto, acortando de 17 a 11 puntos la diferencia que lo separaba de Frei en un escenario de primera vuelta.

En la última semana, el postulante independiente hizo dos emplazamientos directos a la primera gestión presidencial de Frei. El miércoles pasado, en el debate presidencial que transmitió TVN, el diputado apuntó contra el senador por la mala calidad de las viviendas que se construyeron durante su mandato. Y el viernes, en un foro de ComunidadMujer, cuestionó la escasa participación femenina en ese gobierno y mostró una foto del ex mandatario con su gabinete, en el que no aparece ninguna mujer.

El pronunciamiento de ayer coincide con una tesis que es compartida al interior de su comando: de no llegar a segunda vuelta, Enríquez debe mantener una actitud de prescindencia total, porque un apoyo a Frei significa renunciar al capital político que ha construido en base a un discurso crítico con el establishment oficialista.

En las últimas semanas, Enríquez también ha lanzado críticas en contra de Sebastián Piñera. Además, ha intentado imponer la idea de que él es el heredero de Michelle Bachelet.

CITA CON ALAN GARCIA
En su segundo día de estadía en Buenos Aires, el presidenciable independiente reforzó el mensaje que le había dejado en la víspera a la Presidenta Cristina Fernández, en cuanto a enfatizar la relación de Chile con los países limítrofes. En esa lógica recibió una buena noticia, ya que el canciller peruano, José García Belaunde, confirmó que el mandatario limeño, Alan García, accedió a la solicitud hecha por el candidato chileno para ser recibido en la Casa de Pizarro.

En agosto, el mandatario peruano calificó el pensamiento de Enríquez como "refrescante, novedoso".

El encuentro forma parte de la agenda internacional que Enríquez desplegará en las próximas semanas y que contempla visitas a Brasil, Bolivia, España y posiblemente Francia.