En plenas vacaciones, muchos niños prefieren despertarse tarde, levantarse, almorzar, volver a la cama, ver televisión, jugar videojuegos y así. Una rutina que muchos califican como sedentarismo.

Por esto, la pediatra estadounidense, Debra Yeh, recomendó cinco pasos para que los padres saquen del sillón a sus hijos y no sólo para ejercitarse sino también para fomentar valores como la consistencia y disciplina.

Una de las recomendaciones apunta a que los padres hablen del tema con sus hijos. Según la especialista, le pueden preguntar sobre qué actividad estarían dispuestos a hacer. Es importante que sea una conversación casual y abierta para que el menor no se lo tome como una obligación más.

Ser creativo. Jugar futbol con los amigos o aprender a surfear son actividades que ejercitan el cuerpo y son divertidas para los niños. Una de las forma de proponer y elegir qué hacer, es tomar en cuenta el contexto de donde se vive. Por ejemplo, si la familia está de vacaciones en el campo sería recomendable hacer "caminatas de descubrimiento". "No es necesario que sea difícil y con muchas reglas, sólo muévete", explicó la especialista a Education.com.

Además, Yeh aconsejó a los padres a invitar a los hijos a hacer ejercicios en compañía de un amigo. Lo ideal, señaló, sería que los propios padres se conviertan en este compañero y con esto pasan tiempos juntos, aclaró.

No solo ver monitos y películas en la televisión. Según la experta, a los escolares hay que enseñarles a comer y a ejercitarse. Una de las formas, puede hacerse viendo un buen programa de televisión al respecto que explique las consecuencias de consumir golosinas y frituras todos los días, por ejemplo.

Reconocer los esfuerzos que hace el menor es necesario para motivarlos.  "Tome nota de los pasos que logra hacia una mayor actividad física. Ante esto, se puede ofrecer un premio o un buen comentario como: "Me encanta verte haciendo karate, cada día lo haces mejor"", explicó Yeh a Education.com.