Mañana se cumple el décimo aniversario de la entrada en vigencia del Acuerdo de Alcance Parcial (AAP) entre Chile e India, que marcó un hito no sólo en la relación entre ambos mercados, sino también en el vínculo entre la tercera mayor economía asiática y América Latina. Esto, porque nuestro país se convirtió en el primer socio comercial de India dentro de la región.
El convenio "ha sido muy positivo para ambos", aseguró Paulina Nazal, jefa de la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon), quien detalló que el intercambio comercial bilateral trepó desde US$ 1.847 millones en 2006 a US$ 2.169 millones el año pasado, lo que supone un crecimiento de 17,4%.
En 2016, Chile exportó productos que totalizaron US$ 1.445 millones, con lo que India se ubica como el octavo mayor socio comercial. Si bien en los últimos dos años los envíos han caído casi 44%, la autoridad explicó que dicho retroceso se debe principalmente a un descenso en los embarques de cobre, que representan un 88% del total.
De hecho, Nazal subrayó que el AAP ha permitido que los envíos no relacionados con el mineral se tripliquen desde la entrada en vigencia del pacto al subir desde US$ 51 millones a US$ 178 millones en la última década. Esto significa que la tasa de crecimiento promedio anual ha sido de 13%.
En tanto, el número de firmas exportadoras chilenas se más que duplicó al pasar desde 108 a 234.
La jefa de la Direcon enfatizó que actualmente dicho país cuenta con cerca de 1.300 millones de habitantes y que se encamina a ser el más poblado del mundo en 2022. A esto se suma el hecho que, dentro de las principales economías, India registra el crecimiento más dinámico, superando incluso a China.
"Se espera que el nivel de consumo del país se triplique para el año 2025, lo que sin duda representa una importante oportunidad para nuestras exportaciones", declaró Nazal.
Profundización
Ambas partes estaban tan satisfechas con los resultados de los primeros cinco años del acuerdo que en 2011 decidieron lanzar las negociaciones para ampliar el tratado original. En septiembre del año pasado se suscribió la profundización del convenio y en mayo comenzó a regir.
La directora general detalló que el objetivo era ampliar la cobertura de los bienes chilenos con preferencias arancelarias.
Con la ampliación, las mercancías con beneficios aumentaron desde 474 a cerca de 3 mil. Entre los principales productos domésticos que se verán favorecidos destacan los alimentos, los productos mineros (cobre y molibdeno) y los productos industriales (celulosa).
Algunos de los alimentos que ahora sí se pueden vender en India son las cerezas frescas, cebollas, paltas, uvas, kiwis, mandarinas, duraznos y cerezas en conserva, la pasta de tomates, cóctel de frutas y jugos de uvas y manzanas.
En tanto, las carnes de cerdo y ave vieron una mejora en su preferencia.
"A diferencia del acuerdo original, el proceso de profundización contempla, en su mayoría, márgenes de preferencia arancelaria entre un 80% y 100%, decisivos para aumentar la presencia y competitividad de nuestra oferta exportable en el mercado", acotó Nazal.
En importaciones, los sectores que gozarían de una rebaja arancelaria son el automotriz, medicamentos, productos químicos, plásticos, aceros y textiles.