Durante su recorrido por la región de Valparaíso, el Premio de Poesía Pablo Neruda 2009, Ernesto Cardenal, visitó la Capital Cultural del país para compartir con cientos de sus habitantes los versos que lo hicieron merecedor del máximo reconocimiento que hace el Estado de Chile a las letras Iberoamericanas.
Fueron más de 300 las personas que llegaron ayer al edificio del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes para escuchar al poeta nicaragüense, quien compartió escenario con los artistas locales Juan Cameron, Enrique Moro y Karen Hermosilla.
La presentación, organizada por el CNCA, fue presidida por el Subsecretario de Cultura, Eduardo Muñoz, quien destacó la importancia de la visita de Ernesto Cardenal a Valparaíso.
"Decir que estamos premiando solamente la literatura de Ernesto Cardenal es demasiado simple, lo que estamos reconociendo es una trayectoria, una voz de muchas voces, las letras iberoamericanas, pero sobretodo, reconocer la consecuencia transformada en belleza, transformada en palabras. Queremos agradecer a Ernesto Cardenal por volver una vez más a nuestro país, por enseñarnos que la poesía es belleza, la belleza del amos, del compromiso y la consecuencia", señaló el Subsecretario de la cartera, Eduardo Muñoz.
Ernesto Cardenal estuvo sobre el escenario por más de 30 minutos compartiendo parte de sus obras, entre ellas un trabajo inédito sobre Víctor Jara, con el público presente en un encuentro que fue calificado por el propio poeta como "una selección que forma parte de su experiencia de vida y su recorrido, siendo en su mayoría poemas de amor, prosa para mujeres".
Antes de participar en el encuentro con poetas locales, Ernesto Cardenal visitó el edificio de la Población Unión Obrera, recinto construido a fines del siglo XIX y que forma parte de la historia porteña.
Posteriormente, se trasladó al Taller de Acción Comunitaria (TAC) del cerro Cordillera, lugar en que recibido por 120 vecinos del sector, conociendo el trabajo que la organización ha desarrollado durante 21 años en el desarrollo cultural y vecinal.
Cardenal manifestó lo mucho que le gustó la ciudad Patrimonio de la Humanidad, aunque destacando el valor de sus habitantes.