Anoche, mientras Camilo Escalona se encontraba en Puerto Montt, un grupo de dirigentes del PS llegó hasta el monumento de Salvador Allende en la Plaza Constitución para protestar por las declaraciones del timonel socialista, quien calificó como un "grupo de fracasados" a los militantes que han renunciado al partido en los últimos días.

Aunque el timonel socialista ha desestimado la magnitud de la fuga de militantes -señalando que en los últimos meses se han retirado no más de 80 personas, frente a 15 mil nuevos inscritos-, en el PS señalan que habrá que esperar hasta el lunes para hacer un real recuento de las desafiliaciones.

A las 19 horas de ese día está convocada la comisión política de la colectividad, cita en que debería dilucidarse la suerte de varias precandidaturas parlamentarias, justo un día antes de que venza el plazo para que, quienes eventualmente queden disconformes, renuncien a la colectividad y postulen como independientes.

Ayer, de hecho, el presidente de la Confusam, Esteban Maturana, acudió al Servel para oficializar su renuncia a las filas socialistas. El dirigente sindical se había inscrito al interior del partido por Pudahuel y anunció que ahora evaluará su postulación como independiente y la posibilidad de sumarse a la candidatura de Marco Enríquez-Ominami.

Para evitar nuevas tensiones, en el PS señalan que la mesa tiene previsto hacer gestos a la disidencia y resolver algunas disputas por cupos parlamentarios mediante encuestas. Ese sería el caso, por ejemplo, de San Fernando, donde se enfrentan Guido Camú (cercano a Carlos Ominami) y Juan de Dios Parra (cercano a la mesa y a Juan Pablo Letelier).

En el entorno de Escalona destacan que, pese a las fuertes críticas a su gestión, la disidencia ha cerrado filas con la candidatura de Eduardo Frei. Sin embargo, el epíteto de "fracasado" que hace unos días utilizó Escalona para referirse a quienes renunciaron al PS para adherir a otras candidaturas presidenciales, ayer continuó generando reacciones.

El ex timonel del PS, Jorge Arrate, que dejó la colectividad para levantar una candidatura presidencial en representación del pacto Juntos Podemos, dijo ayer que "lo único que nos falta ahora es que Camilo Escalona nos llame rotos upelientos".

En la protesta de anoche, dirigentes socialistas que apoyan a Enríquez-Ominami señalaron que Escalona ofendió al propio Allende, pues en 1951 optó por renunciar al PS Popular para levantar su primera candidatura presidencial cuando esa tienda entregó su apoyo a Carlos Ibáñez del Campo.
 
En el PPD, en tanto, ayer concretó su renuncia al partido Leonardo "Pollo" Véliz, para sumarse al equipo programático de Enríquez-Ominami.