Una nueva señal de rechazo a la idea de impulsar una asamblea constituyente dio el presidente del Senado, el socialista Camilo Escalona.
En su columna semanal, el presidente de la Cámara Alta acusó "una vistosa arremetida del comunismo chileno en mi contra, desconociendo la lucha que llevamos adelante durante décadas por reformas constitucionales que avancen hacia una nueva Constitución en Chile".
"Me culpan, de manera gratuita, de no facilitar una asamblea constituyente, como si las cosas fueran tan simples y el destino de los países tan fácil", agregó el senador respecto de las críticas del presidente del Partido Comunista, el diputado Guillermo Teillier, quien planteó que no dar esta discusión es "irresponsable y antodemocrático".
En este sentido, Escalona manifestó que la búsqueda de un cambio constitucional debe realizarse por la vía institucional.
"Las reformas constitucionales son necesarias y posibles. Pero fijar como política de izquierda que debe haber una asamblea constituyente para realizarlas, significa que tales reformas difícilmente se alcanzarán o que, incluso, no se alcancen en ningún caso", aseveró.
Para Escalona, "una política de esa naturaleza no logrará la mayoría necesaria para sustentarse en nuestro país". Por ello pidió "no facilitar la confusión entre las reformas constitucionales pendientes y esta idea de una asamblea constituyente. No son la misma cosa. Son caminos estratégicamente distintos".
"Ahora, nuevamente, ante demandas multitudinarias, como una educación gratuita y de calidad, se confunden, pensando en una solución extrainstitucional que no es lo mismo que las reformas constitucionales pendientes que avanzan, a largo plazo, hacia una nueva Constitución en nuestro país", manifestó.
Finalmente, Escalona destacó que "la política socialista se sustenta en la confianza en las mayorías nacionales. Podría parecer que este camino no resulta ni tan épico ni tan heroico, pero es el camino que ha seguido la nación y el pueblo de Chile para tener democracia y libertad".