Escondida, el mayor yacimiento de cobre del mundo, y su sindicato volvían a reunirse el martes en un intento por poner fin a una huelga de 12 días, luego que los trabajadores flexibilizaran sus demandas económicas.
La protesta ha impulsado el precio mundial del cobre en los últimos días, en medio de temores a una falta de suministros, y obligó a la compañía a declarar fuerza mayor para sus envíos de concentrado.
Escondida, controlada por BHP Billiton, ya habría dejado de producir unas 36.000 toneladas de cobre por la huelga, lo que equivale a unos US$360 millones.
Los líderes sindicales acordaron reunirse hoy martes con la empresa para continuar la discusión, que solamente se ha estancado por un bono clave.
Los trabajadores anunciaron en la víspera que disminuían el monto exigido del bono a unos US$8.800 desde los US$11.000, en lo que consideraron una muestra de flexibilidad para negociar.
"Esto me da una señal de que lo más probable es que haya una salida al conflicto en las próximas horas, pero depende de la compañía," dijo Cristian Arancibia, presidente de la Federación Minera, que agrupa a gremios de empresas privadas en el país.
Escondida, que produce el 7% del cobre mundial, declinó realizar comentarios.
La firma ha ofrecido recientemente a cada uno de los 2.375 trabajadores en huelga unos US$5.700 por el bono, que no está contemplado en el contrato colectivo. Los dirigentes aseguran que la huelga finalizaría con la solución de ese tema.
Cubrir la demanda económica de los trabajadores costaría unos US$20 millones, menos de un día de producción en el enorme yacimiento. Pero analistas creen que ceder con premura podría sentar precedente para nuevos conflictos.