La inyección de capital que los bancos españoles nacionalizados (Bankia, Novacaixagalicia, Caixa de Catalunya y Banco de Valencia) recibirán de los países de la zona euro estará en torno a 37.000 millones de euros, dijo hoy el ministro de Economía de España, Luis de Guindos.
"No creo que vaya a haber sorpresas, para los bancos nacionalizados la cantidad va a estar en torno a 37.000 millones, por debajo de los 40.000 millones", explicó De Guindos a su llegada a la reunión que el Eurogrupo celebra hoy en Bruselas sobre la crisis griega.
De Guindos indicó que, además de los fondos que irán a parar al "banco malo", se destinará también una "cantidad limitada" a los bancos que también necesitan ayuda para recapitalizarse, pero no pertenecen al grupo de los nacionalizados.
"En conjunto puede estar en el entorno de 40.000 millones de euros, cifra que siempre hemos estado manejando, que supone un poco más del 3% PIB de España", estimó el ministro.
El ministro español recordó que este miércoles la Comisión Europea aprobará el plan de reestructuración de la banca española, paso previo al desembolso de ayuda financiera que está previsto para diciembre.
El Ejecutivo europeo también establecerá las condiciones de este proceso de reestructuración, que se cumplirá en un plazo de cinco años, y los criterios para las pérdidas que asumirán los titulares de preferentes, indicó el ministro.
"A partir de los planes de reestructuración se establecerá lo que es la evolución de la senda del exceso de capacidad en un plazo de cinco de años y también todo lo que es la conversión de preferentes en diferentes alternativas, lo que se denomina la distribución de la carga", aseguró De Guindos.
El ministro eludió dar cifras de los ajustes de plantilla y del cierre de oficinas financieras en los planes de reestructuración y recalcó que esto es una decisión de Bruselas.
"Eso no es el Gobierno español quien lo determina, es la Dirección General de Competencia (de la Comisión Europea) y así está establecido", explicó De Guindos, quien añadió que "siempre que hay ayudas públicas hay planes de reestructuración, ocurre en todos los bancos europeos".
Respecto a la disposición de España a solicitar de manera inminente una ayuda financiera completa al fondo de rescate permanente europeo (MEDE), el ministro señaló que "la posición del Gobierno español no se ha modificado en absoluto".