La niña africana de diez meses, cuya historia conmocionó a los rescatistas del sur de España tras llegar sin sus padres en una lancha junto con más inmigrantes, se encuentra con una familia española de acogida.
Sus padres, quienes no pudieron subir a la embarcación a causa de un enfrentamiento con la policía de Marruecos, fueron localizados, informó la prensa española.
A los niños se los aloja en un centro de menores de edad, pero al tratarse de una bebé las autoridades españolas decidieron la entrega a una familia de acogida.
Sus padres podrían intentar de nuevo alcanzar las costas españolas en las próximas horas, según consideran las autoridades locales.
Nunca antes se había conocido que un bebé llegara a las costas españolas sin su familia.
La niña, a quienes los rescatistas llamaron Princesa, pero que en realidad se llama Fátima, llegó a Tarifa, sur del país, con fiebre, temblando de frío y con la ropa empapada.
Había realizado la travesía de unos 15 kilómetros que separan Marruecos de España por el estrecho de Gibraltar a bordo de una lancha de juguete junto a otros dos bebés, tres hombres y cinco mujeres, dos de ellas embarazadas.
Sus compañeros de lancha dijeron que los padres de la beba no pudieron subir porque se produjo un intercambio de pedradas con gendarmes marroquíes que los empujaron a dejar a la niña en la embarcación y quedarse ellos en tierra.
Al comprobar que la niña tenía fiebre una enfermera de Tarifa le suministró un antipirético infantil en el mismo puerto.
Después Princesa durmió seis horas seguidas en una bañera arropada por una manta, tras lo que se tomó dos biberones de leche seguidos.
La niña es una de las 920 personas que llegaron este martes al sur de España a bordo de 94 pequeñas embarcaciones en una de las mayores oleadas de inmigrantes de los últimos años.
La niña se encuentra bien, confirmó Cruz Roja, que entre el lunes y el martes atendió a 46 inmigrantes menores de 6 años en Tarifa llegados desde Marruecos.