"No tenemos ningún dato o antecedentes de que esto guarde relación con algo de carácter emocional o de relaciones de pareja". Con esas palabras, el jefe de la Fiscalía Regional Metropolitana Oriente, Manuel Guerra, descartó por ahora la versión planteada por el ex presidente Sebastián Piñera, respecto a los alcances del hallazgo de micrófonos en las oficinas de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) y la empresa Carozzi.
El domingo, en el programa "En Buen Chileno" de Canal 13, el ex mandatario dijo que "tengo la impresión de que este caso va a tener un vuelco total, porque la información que yo tengo es que esto no se trata de espionaje político, ni industrial, que es una cosa mucho más doméstica, que tiene que ver con relaciones de pareja".
Guerra agregó, no obstante, que "todas la líneas de investigación que puedan surgir tenemos el deber de que sean investigadas" y si bien desestimó por el momento citar a declarar a Piñera, señaló que "cualquier persona que tenga antecedentes en su poder y que puedan ser relevantes para el esclarecimiento de los hechos, nosotros le pedimos que ojalá lo haga llegar a la Fiscalía. Y eso no excluye a nadie".
Aunque en la jornada de ayer el ex presidente matizó sus dichos -"no tengo la certeza, tengo una impresión", dijo en una entrevista en Radio Concierto-, éstos no dejaron indiferente al mundo político. Desde el oficialismo criticaron a Piñera, mientras que el tema también fue abordado en la reunión de coordinación de Chile Vamos. También el empresario Andrónico Luksic, a través de Twitter comentó que "mala cosa que ex presidente Piñera meta más pelos a esta sopa que ya tiene varios. Esperemos conclusiones de la Fiscalía, no especulemos más".
Diligencias
En paralelo, los fiscales a cargo, Lorena Parra y Roberto Contreras, continúan sus diligencias. Así, la Fiscalía de Las Condes citó declarar para hoy a las 16 horas, en calidad de testigo, al director de Carozzi y ex vicepresidente de la Sofofa, José Juan Llugany. Consultado su abogado Pablo Gómez, desestimó referirse al tema. La oficina de Llugany en Carozzi fue el primer lugar donde la firma de investigación privada Profacis detectó un micrófono, lo que se repitió días después en las oficinas del ex timonel de la industria Hermann von Mühlenbrock.
Ayer, los fiscales del caso tomaron declaración a la encargada de informática de Sofofa, Cecilia Cruz, y a su jefe, el gerente corporativo Carlos Cayo. Según trascendió, fueron consultados sobre las circunstancias en que se efectuó el hallazgo de los micrófonos y los contactos que se generaron entre Sofofa y Rubén Aros, el ex carabinero dueño de la empresa Profacis.
El fiscal Manuel Guerra también se refirió ayer a la declaración que entregó el viernes Aros, en calidad de imputado. Anteriormente, lo había hecho como testigo. "Nos parece que es un tema relevante y lo tenemos en condición de imputado, porque obviamente que el día de mañana, si eventualmente llegásemos a perseguir una responsabilidad penal, esa declaración podría ser mejor utilizada y él no podría escudarse en una condición de testigo".b
