El repudio deportivo no basta. El ataque racista que recibió Emilio Rentería en Rancagua, durante el partido entre O'Higgins y Arica, traspasa los límites del fútbol. El asunto llegó a La Moneda y también al Parlamento. Las denuncias, posiblemente, no sólo llegarán a los tribunales de la ANFP, sino también a los de justicia.
La ANFP enviará los antecedentes al Tribunal de Disciplina, solicitando "las máximas penalidades" a los responsables en el caso del futbolista venezolano. Estadio Seguro, en tanto, evalúa sumarse con una querella contra los involucrados, invocando la Ley Antidiscriminación, más conocida como Ley Zamudio.
El artículo 2º de esta norma establece como discriminación, entre otras cosas, el menoscabo de cualquier particular por motivos de raza o etnia, la nacionalidad o la apariencia personal.
En ese sentido, el jefe del Plan Estadio Seguro, José Roa, asegura que están en coordinación con la ANFP para identificar a los responsables. "Queremos dar una señal contundente, junto con la ANFP. No descartamos ningún tipo de medida y denuncia hacia los autores del caso". En referencia puntual a la Ley Zamudio, agregó que "lo evaluaremos como una medida a tomar".
Desde la Comisión de Deportes de la Cámara, tampoco descartan presentar una denuncia por la Ley Antidiscrminatoria. Eso sí, el diputado Celso Morales explica que la querella debe ser presentada por un miembro particular de la Comisión.
En O'Higgins, donde repudiaron los insultos racistas hacia Rentería, asumen que este caso puede llegar a Tribunales. Por lo mismo, el club ordenó una investigación y está a la espera de las imágenes de las cámaras de seguridad del día del partido ante San Marcos, para lograr dar con la identidad de los hinchas racistas.
"Estamos en coordinación con la ANFP y Estadio Seguro para dar con los responsales de los hechos. ¿Si nos denuncian como club? Es parte de las posibilidades. Pero primero tiene que llegar la denuncia y luego la tendríamos que analizar con abogados. Es una situación hipotética", explica Pablo Hoffman, gerente deportivo del cuadro de Rancagua.
En medio de todo esto, Rentería, en diálogo con La Tercera, confesó que espera que el club celeste no reciba ninguna sanción por su caso.
"Me pondría muy mal que recibieran una sanción. El estadio o sus dirigentes no deben pagar por un grupo pequeño de hinchas. Si fuera yo, no los sancionaría", analiza el delantero venezolano, quien el domingo pasado recibió el apoyo del Sindicato de Futbolistas Profesionales (Sifup).
Eso sí, el seleccionado venezolano, quien enfrentará a Chile este viernes en un amistoso en Talcachuano, espera que con su caso y lo que está generando, se acabe el racismo en Chile: "No me gustaría que le pase a otro jugador. Probablemente, otro no reaccionaría tan tranquilo como yo".
La ANFP, tras la reunión extraordinaria que realizó ayer en torno al caso Rentería, también anunció que su presidente Sergio Jadue recibirá en los próximos días al embajador de Venezuela en Chile, Arévalo Méndez.
De hecho, fue el mismo Méndez quien solicitó una reunión a Jadue tras el caso racista que vivió su compatriota en Rancagua.