Un grupo de activistas estadounidenses protestó hoy ante la embajada de Washington en Tegucigalpa para exigirle al Presidente de EEUU, Barack Obama, que pase de las "palabras a la acción" y retire a su embajador en Honduras, en rechazo al golpe de Estado contra el depuesto Manuel Zelaya.

El grupo de manifestantes, que se reunió con el embajador de EEUU en Honduras, Hugo Llorens, protagonizó un plantón frente a la legación diplomática, donde exhibió pancartas a favor del reintegro inmediato de Zelaya en la Presidencia hondureña.

"Sentimos, por un lado, que las palabras de EEUU han sido muy positivas, sin embargo, las acciones no. Falta ser más consecuente, falta retirar a su embajador de aquí, retirar sus soldados de (la base militar de) Palmerola", declaró Lisa Sullivan, coordinadora para América Latina del Observatorio de la Escuela de las Américas (Soa Watch).

En su opinión, Obama condena el golpe a Zelaya, pero realmente "su actuar no ha puesto la fuerza detrás de esa palabra".

Sullivan explicó que la mediación "no es la solución" a la crisis política en Honduras, "sino exigir sin condición el regreso del Presidente constitucional".

El reverendo Roy Bourgeois, fundador de Soa Watch, declaró que el país centroamericano sufre "una gran injusticia" y un "escándalo internacional".

Demandó, además, el cierre de la Escuela de Las Américas donde, según Sullivan, se han entrenado más de 60 mil soldados de la región, entre ellos 4 mil militares procedentes de Honduras.

"Dos graduados de esa escuela fueron los que participaron, planificaron y los encargados del golpe de Estado (en Honduras)", añadió Sullivan.

Se refirió así al jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas hondureñas, Romeo Vásquez, y al comandante de la Fuerza Aérea, Luis Javier Prince.