Eneuresis es la denominación para la enfermedad que tienen los niños de más de cuatro años que no pueden controlar aún sus esfínteres. Los adultos tampoco están ajenos a este mal. Este es el punto de partida para la obra Eneuresis, montaje teatral dirigido por Magdalena del Río y escrita por Camila Ureta. Una dupla que el año 2010 llevó a las tablas Matacrisis, adaptación de la novela Fatamorgana de amor con banda de música, de Hernán Rivera Letelier.

La obra se centra en Amadeo, un reconocido galán de teleseries, quien no puede demostrar en su vida privada esa seguridad y desplante que le exigen sus roles en la pantalla chica. El actor es diagnosticado con "eneuresis nocturna secundaria", un trastorno provocado por factores sicológicos que lo hace orinar sin control luego del acto sexual, situación que le impide generar cualquier relación estable.

Es por eso que decide buscar ayuda profesional. Así, llega a la consulta de Ana, una obsesiva y radical siquiatra que con arriesgados métodos lleva finalmente la relación más allá de una entre médico-paciente.

Este es el núcleo de la trama de Eneuresis, que entre el 1 y el 11 de agosto se presentará en la sala Lastarria 90 (José Victorino Lastarria 90). "La tecla que estamos pulsando para llevar a las tablas la obra es el humor negro", dice Magdalena del Río, sobre la pieza que cuenta con la actuación de Cristián Garín en el rol de Amadeo, y con Camila Ureta encarnando a Ana.

"Esta fue una idea que Camila desarrolló en un taller de dramaturgia con Juan Radrigán, basada en un conflicto que ella misma tuvo con este tema", agrega Del Río. Un tema que a todas luces es poco común, factor que para la directora le da mayor atractivo a la pieza.

La puesta en escena, por lo mismo, también juega con esos quiebres. "Es un amor no convencional, que se va desarrollando a medida que los personajes se van conociendo, a través de una puesta en escena que usa cuerdas e imágenes audiovisuales", señala la directora.

Así, durante la obra, los personajes aparecen amarrados, tirando de gruesas cuerdas que parecen contener sus trancas. Para Del Río "esto es, porque ella tiene un estilo siquiátrico que adopta métodos radicales luego de ciertos problemas en su vida, entonces se relaciona fuertemente con sus pacientes y les da soluciones igualmente radicales".

A pesar de estos giros que pueden sonar más cercanos a lo metafórico, la directora señala que finalmente la obra "posee un estilo igualmente realista, tratamos de buscar el movimiento a partir del juego del actor, con imágenes como un test de Rorschach que se ve de fondo, o con la presencia de la música, factores que finalmente potencian la actuación". De esta manera, Eneuresis busca lograr algo "más cinematográfico, pero dentro de una actuación realista", agrega.

Tras estas primeras presentaciones, Eneuresis volverá a Lastarria 90 para exhibirse entre el 22 y el 24 de agosto.