Unos 200 alumnos indocumentados de EEUU exigieron hoy en una manifestación ante el Senado y la Casa Blanca, que contó con la participación del ganador de un Pulitzer José Antonio Vargas, que el Presidente Barack Obama frene las deportaciones e impulse la aprobación del llamado proyecto "Dream Act" para su legalización.

Este llamado se realizó el mismo día en que Obama reiteró su apoyo a la reforma migratoria y al  proyecto que pretende regularizar el estatus de los jóvenes indocumentados, en una conferencia en Washington.

Al enumerar algunos requisitos del "Dream Act", Obama pidió la legalización de estudiantes "que han crecido acá, que se sienten americanos, que están listos para invertir y aportar al país, estudien (en universidades) y luchan en nuestro Ejército, o empiecen negocios".

Los alumnos, primero en un hacinado salón del Senado y después frente a la Casa Blanca, se quejaron de que el gobernante haya apoyado la reforma "con palabras y no con hechos".

Muchos de ellos podrían ser deportados, llegaron a Washington desde estados como California, Texas, Massachusetts, Pensilvania, y Florida, con un mismo mensaje: el sistema migratorio necesita una reforma.

El periodista filipino José Antonio Vargas, quien creó la red "Define American" a favor de la reforma migratoria, tras su confesión pública de que es indocumentado, dijo que reveló su caso porque se inspiró en las historias de estudiantes que caminaron 2.414 kilómetros desde Miami para que se escucharan sus voces (en Washington).

"Nuestro sistema está roto y es hora de una conversación seria sobre cómo corregirlo", expresó Vargas. En declaraciones a Efe, el comunicador se quejó de que los gobiernos estatales sopesan o han aprobado sus propias leyes antiinmigrantes por la inacción de Washington. "Tenemos que elevar el diálogo sobre inmigración en EEUU. porque éste no es un asunto solo latino; somos muy diversos pero queremos lo mismo que quieren los residentes legales, y creo que ése es el mensaje", dijo el periodista.

En el acto, la estudiante hindú Mandeep Chahal, de la Universidad de California en Davis, señaló que Obama "tiene el poder de frenar las deportaciones de gente como yo". Chahal, que lanzó una campaña nacional en Facebook, logró que un juez suspendiera temporalmente una orden de deportación contra ella y su madre pero eso, recordó, no borra la memoria del mal trato que recibió de agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).

Vitoreado por los estudiantes, el senador demócrata y promotor del Dream Act, Dick Durbin, prometió que continuará luchando por la aprobación de la medida.

Parte de la estrategia será una campaña que realizará entre el 24 y 25 de septiembre próximos, para llevar ese mensaje a "iglesias, templos y sinagogas" del país. El "Dream Act" permitiría la legalización de estudiantes indocumentados que, entre otros requisitos, entraron al país antes de los 16 años, completan al menos dos años de universidad o se inscriben en las Fuerzas Armadas.

La medida fue aprobada en la Cámara de Representantes en 2007 pero no logró los 60 votos necesarios en el Senado para proceder a su votación definitiva.

El acto se llevó a cabo en un salón que lleva el nombre del fallecido senador demócrata Edward "Ted" Kennedy, principal arquitecto y promotor de la reforma migratoria.