Algunas de las formas más devastadoras del cáncer podrían contar con similitudes genéticas incluso cuando afectan a diferentes partes del cuerpo, según un estudio publicado este jueves.
La nueva investigación, que consta de un primer estudio centrado en una forma de leucemia y publicado en la New England Journal of Medicine y un segundo estudio de cáncer de endometrio publicado en Nature, podría ofrecer una vía hacia nuevos y más efectivos tratamientos.
Los nuevos hallazgos desafían el anterior enfoque a la hora de clasificar los tumores, basado en la parte del cuerpo donde se observaron por primera vez, y añaden más evidencia a la creciente tendencia a diferenciar los tumores en base a su perfil genético.
La investigación forma parte de un amplio programa llevado a cabo por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos -denominado "Cancer Genome Atlas Project" (Proyecto Atlas del Genoma del Cáncer)- que trata de decodificar el patrón genético de 10.000 tumores de 20 tipos de cáncer distintos.
Gracias a ese análisis, los científicos ya han encontrado relaciones genéticas entre ciertos tipos de cáncer de mama, pulmones y colon.
Por ejemplo, un tipo de cáncer de mama presenta mutaciones genéticas muy parecidas a las encontradas en el cáncer de ovarios, y los cánceres de colon a menudo presentan mutaciones que se encuentran en el cáncer de mama.
Los investigadores afirman que la mitad de todos los cánceres de pulmón podrían responder a tratamientos utilizados en otro tipo de tumores.
El último estudio encontró que la forma más agresiva de cáncer de endometrio, que afecta al revestimiento del útero, es similar a formas más graves de cáncer de ovarios y de mama.
"Los aspectos clínicos y patológicos de un carcinoma seroso uterino y de un carcinoma seroso de ovarios de alto grado, o HGSOC, son muy similares", escribieron los autores del estudio publicado en Nature, que analizó mas de 370 tumores.
De la misma forma, "HGSOC comparte muchas características moleculares similares con el carcinoma de mama de fenotipo basal", añadió el equipo, que fue dirigido por Douglas Levine, del Memorial Sloan Kettering Cancer Center, en Nueva York.
Los investigadores también determinaron que una mutación particular, ya identificada en otros tumores, es más común en tumores uterinos relativamente poco estudiados que en ningún otro cáncer objeto de análisis del proyecto del genoma.
Varios fármacos ya han sido desarrollados para atacar a la mutación. Ahora, gracias a los nuevos datos, estos medicamentos pueden ser potenciados contra el cáncer de endometrio, que acaba con la vida de 8.000 personas y que es diagnosticado a 50.000 cada año.
La investigación en leucemia aguda, realizada a 200 pacientes, identificó al menos 260 mutaciones genéticas implicadas en el cáncer de sangre, pero no fue capaz de detectar ninguna de las que se encuentran sistemáticamente en las formas más graves.
La leucemia mieloide aguda, la forma más común de leucemia encontrada en adultos, se diagnostica a 14.000 estadounidenses y mata a 10.000 cada año.